El sábado 23 se inaugurará la exposición Escrito/pintado; ocupa dos salas del Muac
tensión creativacomo pintor y diseñador
Reúne unas 400 obras y explora uno de los ejes troncales del artista
Su trabajo produce, a la vez que enmarca, la visualidad moderna en México, afirman los curadores Cuauhtémoc Medina y Amanda de la Garza
Por primera vez exhibe la serie Casa de Letras, que comenzó a crear en 2012
Miércoles 13 de mayo de 2015, p. 3
La exposición Escrito/pintado, de unas 400 obras, que el sábado 23 Vicente Rojo (Barcelona, 1932) inaugurará en dos salas del Museo Universitario de Arte Contemporáneo (Muac), explora la tensión y compenetración de las actividades principales del artista como pintor y diseñador
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Según los curadores Cuauhtémoc Medina y Amanda de la Garza –quienes trabajaron en colaboración con la diseñadora Marina Garone, del Instituto de Investigaciones Bibliográficas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)–, desde su arribo a México, en los años 50 del siglo pasado, Rojo ha sido un creador múltiple: pintor, diseñador y editor.
Su trabajo produce, a la vez que enmarca, la visualidad moderna en México, afirman. Quizá la tensión más radical de su trabajo, además de la pasión ética que define su labor cultural e intelectual, ha sido la negociación entre el servicio social y utilitario del diseño editorial, y la defensa de la autonomía, opacidad y dificultad de la pintura.
Medina y De la Garza señalan que en gran parte de su carrera Rojo sostiene una diferenciación funcional y práctica con los ámbitos de pintor y diseñador en su trabajo, circunstancia que refrendaba la oposición entre lo utilitario y lo estético, lo social y lo personal, lo comunicativo y lo enigmático, el gesto y la letra.
Aunque esa voluntad de diferenciación hace de Rojo un paradigma de las alternativas modernistas en el mundo de habla española, es a veces suspendida a través de los puentes establecidos por la señal, la letra o el signo, motivos recurrentes en su producción
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En la primera sala se ofrece una visión histórica de unas tres décadas. Ahí se exhiben obras como Artefacto (1969), su mostrador de libros pintados, la lógica gráfica de series como Señales y Negaciones, en los años 60 y 70, lo mismo que su contribución a la historia del libro de artista –desde los Discos visuales que produjo para Octavio Paz en 1968 hasta sus experimentos recientes de no-textos como Novela (2007) y Jaque mate (2011)–, configuran un espacio intermedio entre los campos estrictamente disciplinarios donde Rojo se desempeña.
De igual forma, continúan, en las múltiples colaboraciones que Rojo ha tenido con poetas, ensayistas y narradores –como José Emilio Pacheco, José-Miguel Ullán, Bárbara Jacobs, Miguel León-Portilla– ha puesto en constante tensión el vínculo entre la imagen y la letra, donde la primera conserva una determinada autonomía, al mismo tiempo que está ligada al tema y a lo enunciado por la letra.
Escrito/pintado aborda este eje troncal
de la obra de Rojo y ofrece, a la vez, una excavación hacia el pasado y una presentación de obra reciente. Por un lado, reúne una selección de obras de diseño gráfico y editorial, libros de artista, series de escultura y pintura, así como dibujos que buscan desplegar la multitud de tensiones entre la letra y la pintura
en su trabajo de los años 60 al presente.
Pintura y escultura de largo aliento
La segunda parte de la muestra, titulada Casa de Letras, presenta por primera 56 obras de Rojo, realizadas desde 2012 y hasta la actualidad. Ahí se hace patente no sólo su vigencia artística, sino que es la prolongación de un trabajo pictórico orientado, en los años recientes, a la realización de series de pintura y escultóricas de largo aliento, donde se plantea un rencuentro con la imagen del texto a partir de una oposición productiva entre lo escrito y lo pintado.
Vicente Rojo: Escrito/pintado se monta en coproducción con El Colegio Nacional, del que el artista es integrante.
El pasado 27 de marzo Rojo abrió allí la muestra Obra compartida, que reunía trabajos de diseño para proyectos con integrantes de ese cuerpo colegiado que, dijo, complementa de alguna manera
(La Jornada, 29/3/15) la exposición del Muac.