Cambian en Jalisco a todos los integrantes de la Policía Federal
Viernes 8 de mayo de 2015, p. 5
Nemesio Oseguera, El Mencho, líder del cártel Jalisco Nueva generación (CJNG), tiene un ‘‘pacto’’ con Ismael El Mayo Zambada, del cártel de Sinaloa, para que ambas organizaciones mantengan el control de sus zonas de operación y no entren otros grupos en sitios como Ciudad Juárez, Chihuahua; Tijuana, Baja California, y San Luis Río Colorado, Sonora, tres de los principales puntos de trasiego de drogas hacia Estados Unidos, indicaron funcionarios del Gabinete de Seguridad Nacional.
En tanto, como parte de la rotación de personal, la Policía Federal (PF) cambiará a todo el personal asignado al estado de Jalisco y de inmediato los nuevos elementos se sumarán a la operación de vigilancia puesta en marcha el pasado primero de mayo.
De acuerdo con la información recabada, a diferencia de las otras organizaciones criminales el cártel Jalisco Nueva generación no se ha divido en mandos regionales ni ha dotado a sus células de autonomía, por lo cual no hay disputas de liderazgo, ya que todo está bajo el control de dos familias: Oseguera y Valencia, ambas con orígenes en Michoacán. En ese contexto, El Mencho ha logrado que sus células respeten los territorios del cártel de Sinaloa y viceversa.
Los contactos entre ambos grupos, explicaron los funcionarios entrevistados, han permitido que Jalisco Nueva generación haya sumado a integrantes de corporaciones policiacas y desertores del Ejército.
En cuanto a confiabilidad, una cuarta parte de la plantilla policial de Jalisco fue reprobada en la más reciente evaluación de control de confianza. La estadística, compilada por el Sistema Nacional de Seguridad Pública, es de noviembre pasado.
En Jalisco fueron sometidos a pruebas 16 mil 44 elementos, de los que resultaron ‘‘en proceso de depuración’’ (esto es, reprobados) 4 mil 406. A escala estatal, resultaron 7 mil 86 evaluados y mil 330 no aprobados; en tanto, en el ámbito municipal la relación es 8 mil 958 aprobados contra 3 mil 76 que no lo fueron.
Hasta ahora, las autoridades estatales no han informado el resultado de esta depuración; la Secretaría de Gobernación les ordenó sacar de las corporaciones a los elementos reprobados. En ese proceso de análisis, 43 mil 609 integrantes de la Comisión Nacional de Seguridad, a la que pertenece la Policía Federal, aprobaron los exámenes, mientras que 2 mil 775 fueron reprobados.
Después de la crisis de seguridad en el bienio 2011-2012, en Jalisco se redujeron las denuncias por homicidios dolosos, secuestros y, en una proporción menor, las extorsiones.
En 2011 se perpetraron mil 222 asesinatos intencionales relacionados con la delincuencia; el último año del sexenio calderonista, mil 184, y el primero de la administración actual, mil 99. El año pasado el nivel cerró en 900 crímenes de este tipo; durante los tres primeros meses de 2015 la incidencia fue de 214 casos.
En cuanto a secuestros, también hay una baja luego de la cúspide de 72 plagios en 2012; en 2014 sólo hubo 22, y en el primer trimestre de este año, similar al mismo periodo de 2014, seis casos. En extorsiones se pasó de 790 en 2013 a 664 al cierre del año pasado. Este año van casi 200.