A pesar de que México es un país que cuenta con los métodos más avanzados en materia de reproducción asistida, las parejas del mismo sexo aún enfrentan retos para formar una familia, en especial en el sector público, el cual cuenta con diversos criterios de exclusión para otorgar el acceso a dichos tratamientos, incluso a parejas heterosexuales.

En conferencia, Gabriela García, presidenta y fundadora de la asociación civil Pronto Nacerán Nuestros Hijos refirió que el estado de Tabasco es la única entidad a escala nacional que tiene una legislación avanzada que permite el vientre en alquiler, independientemente de la preferencia sexual de quien lo solicite.

Señaló que existen tratamientos avanzados, pero lamentó que a escala federal no haya una legislación que permita a parejas del mismo sexo tener acceso a tratamientos de fertilidad en el sector público. Se requiere legislar en el tema de reproducción asistida para garantizar que, sin importar su preferencia sexual, hombres y mujeres puedan elegir cuántos hijos tener.

El acceso a las técnicas de reproducción asistida, dijo, implica el respeto a una serie de derechos humanos a la igualdad, la no discriminación, la autonomía reproductiva y a beneficiarse del progreso científico en lo referente a la biología de la reproducción humana.

Sin embargo, dijo, en nuestro país no cumplir con el modelo de pareja tradicional puede frustrar el sueño de ser padre o madre, si no se cuenta con los recursos suficientes para acudir a una clínica privada

Desde la creación de la organización, en 2010, se han atendido a 762 parejas, de las cuales 27 por ciento se encuentra entre los 31 y 35 años y un porcentaje mayor entre los 36 y 40 años, esto representa que al menos 165 personas se han sometido a un tratamiento de fertilidad.

Por su parte, Carlos Navarro, especialista en biología de la reproducción humana y director médico del Centro Especializado en Infertilidad y Atención a la Mujer, recordó que, sin importar su preferencia sexual, seis de cada 10 parejas en México tienen problemas de infertilidad.

Añadió que en la actualidad, los tratamientos de fertilidad disponibles para las parejas de la comunidad LGBTTTI son los mismos a los que recurre una pareja heterosexual: donación de óvulos, inseminación asistida e incluso el vientre subrogado. En función de las necesidades y edad de cada paciente se establecerán las opciones de tratamiento más adecuadas,