Viernes 3 de abril de 2015, p. 23
Moscú. La producción petrolera de Rusia alcanzó en marzo un nuevo máximo desde la época de la Unión Soviética, alimentando un aumento en las exportaciones y sumando presión a la saturación global que mantiene bajos los precios del crudo. Los grandes productores de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en el Golfo Pérsico han optado por mantener su cuota de mercado, asegurando que sólo recortarán su producción para subir los precios si otros –como Rusia– hacen lo mismo. Funcionarios rusos dijeron que es complicado ajustar de forma significativa el bombeo por lo difícil que es el mantenimiento los pozos. Los gigantes energéticos Gazprom y Rosneft llevaron la producción petrolera a su máximo postsoviético de 10.71 millones de barriles por día (bpd) en marzo, según el Ministerio de Energía.