Parma.

Un tribunal italiano declaró ayer en bancarrota al Parma y nombró a dos funcionarios contables para determinar si el club puede continuar la temporada de la Serie A de futbol.

El juez Pietro Rogato anunció la quiebra del equipo y confirmó que éste tiene deudas globales por 218 millones 446 mil 754 euros y un patrimonio neto negativo de 46 millones 697 mil euros. Además, indicó que el Parma tiene un débito deportivo estimado en 74 millones 361 mil euros, de los cuales 63 millones 39 mil 920 son con los jugadores.

El estado de insolvencia es evidente e irreversible, dijo el magistrado e indicó que el capitán del equipo, Alessandro Lucarelli, formará parte del comité de acreedores, al lado de las sociedades Colser Scrl e Iren Mercato Spa.

Los contadores Angelo Anedda y Alberto Guoiotto administrarán el club, en coordinación con el tribunal y el comité de acreedores, y definirán si existen las condiciones para que el Parma concluya el torneo del calcio.

También deberán determinar la entidad de los pasivos de la sociedad y las eventuales responsabilidades de sus ex dirigentes, aparte de liquidar las actividades a través de la venta de sus bienes.