Con vínculos en la situación actual de los migrantes, la exposición 303: la matanza de chinos en Torreón se exhibe en el Museo Memoria y Tolerancia.

La muestra, curada por Adriana Gallegos y Carlos Castañón, recupera el asesinato de tres centenares de personas, casi la mitad de la comunidad china en la ciudad fronteriza en 1911, cuando las tropas maderistas tomaban control de la plaza en los inicios de la Revolución Mexicana.

Linda Atach, directora del área de exposiciones temporales del recinto, dijo que este suceso se trata de un caso emblemático que nos muestra y previene sobre los tristemente potentes alcances de la xenofobia.

Recordó que esa historia se halla presente, ya que los rieles que los chinos tendieron hace más de un siglo son sobre los que transita La Bestia, que ahora transporta migrantes, y son emblema de la desgracia de las personas en tránsito de la actualidad. Podemos acercar esta tragedia a los sucesos actuales.

Compuesta por varias salas, la exposición comienza con una enorme foto mural en la que se mira a dignatarios chinos acompañados por personas vestidas a la usanza de la oficialidad europea, junto a unos rieles tendidos. Continúa con una historia de la migración china a nuestro país, las diversas fases de hostigamiento a esa comunidad hasta la violenta ejecución en las calles de Torreón; concluye con una revisión de algunos aspectos de los migrantes de hoy.

Ese suceso está presente, ya que los rieles que los chinos tendieron hace más de un siglo son sobre los que transita La Bestia, dijo la directora de exposiciones temporales del museo, Linda AtachFoto María Meléndrez Parada

En su turno, Ricardo Bucio, titular del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, explicó que mencionar esta matanza es muy importante en el contexto de una situación de agresiones, ya no de parte de un ejército en particular, sino de autoridades, vecinos, el crimen organizado; a través de estas agresiones constantes en México contra migrantes podemos conocer las expresiones de nuestra xenofobia.

El funcionario estableció un paralelo entre la matanza de 72 migrantes en San Fernando, Tamaulipas, y los 303 chinos muertos en Torreón, por su invisibilidad. La cifra fue reproducida en redes sociales y en medios, pero no despertó una alarma social.

Por su parte, la curadora Adriana Gallegos afirma que “ahora hablamos de 72, de 43 (en referencia a los estudiantes desaparecidos en Iguala)... en aquel momento fueron 303 personas.

La historia como tal no es sólo una narrativa, sino que es este vínculo que tenemos desde el presente hacia el pasado; es también un lazo, un nexo, que hacemos los vivos hacia los muertos.

Para concluir, el otro curador, Carlos Castañón, dijo que esta exposición es importante no sólo para Torreón, sino para México, que vive una y otra vez momentos muy difíciles con sus migrantes y con sus propios ciudadanos; me parece que es una advertencia desde ese duro pasado a este duro presente que tenemos.