Colima, Col.

El gobierno de Colima alienta el conflicto entre grupos de indígenas para favorecer a la empresa Gobfer SA de CV, que pretende instalar una mina de oro y plata en Zacualpan, municipio de Comala, concluyó la misión de observadores nacionales e internacionales al terminar una visita en la zona de conflicto.

Gustavo Lozano, de la Red Mexicana de Afectados por la Minería, comentó que se documentó la forma en que esa empresa y las autoridades alteran la vida comunitaria en Zacualpan y pasan por alto resoluciones judiciales y administrativas.

En rueda de prensa, añadió que 44 por ciento del territorio del estado ha sido entregado a empresas nacionales y extranjeras, lo cual hace que Colima ocupe el deshonroso primer lugar nacional en territorio concesionado.

Lozano detalló que el conflicto es resultado de la política del gobierno federal, que en forma indiscriminada y sin respetar los derechos colectivos de los pueblos indígenas ha entregado infinidad de concesiones mineras sin que los pueblos del país, en especial de Colima, estén enterados y mucho menos hayan sido consultados.

Betina Cruz, de la Asamblea de los Pueblos Indígenas del Istmo de Tehuantepec, Oaxaca, explicó que dos concesiones siguen vigentes a pesar de que ocupan territorio agrario de Zacualpan.

Además, dijo, ha habido extracción ilegal: en 2012 más de 25 camiones sacaron material sin que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente iniciara una investigación, pese a que se presentaron denuncias.

El presidente de bienes comunales de Zacualpan, Carlos Guzmán Teodoro, quien apoyaba el proyecto, fue sustituido en 2014 por Taurino Rincón Lorenzo.