Simpatizantes y amigos asisten al funeral; Putin envía una corona de flores
los héroes no mueren, despiden al opositor ruso Nemtsov
Miércoles 4 de marzo de 2015, p. 30
Moscú.
Los restos de Boris Nemtsov, el líder opositor asesinado en el centro de la capital rusa la noche del pasado viernes, recibieron sepultura este martes en el cementerio de Troyekurovo, al oeste de la ciudad, después de que miles de personas le rindieron el último adiós en una ceremonia luctuosa que tuvo lugar en el Centro Sajarov de Moscú.
Ante el féretro del político desfiló en silencio, de las diez de la mañana a las dos de la tarde, mucha gente que quiso rendir tributo a su memoria. Durante esas cuatro horas, la fila de más de un kilómetro que se formó cuando comenzaron las exequias se mantuvo intacta con la llegada continua de más personas.
No todos pudieron depositar junto al ataúd las flores que llevaban ni entrar a la pequeña sala en que amigos, colegas de partidos de oposición al Kremlin, los pocos representantes de las autoridades y algunos extranjeros a título personal se sucedieron, frente al micrófono, para expresar sus condolencias y elogiar a Nemtsov.
Acudieron casi todas las figuras de la oposición extraparlamentaria rusa, así como miembros del gobierno de Boris Yeltsin, en el cual Nemtsov se desempeñó como ministro de Energía y primer vicepremier.
Condenado a 15 días de prisión como sanción por distribuir en el metro de Moscú, sin el respectivo permiso, volantes en favor de una manifestación de protesta, un juez denegó a Aleksei Navalny, otro de los líderes de la oposición, la autorización para ir al funeral de su amigo.
Tampoco estuvo presente Garry Kasparov, ex campeón mundial de ajedrez y antiguo compañero de Nemtsov en las filas de los adversarios del Kremlin, que hace años emigró de Rusia por sentirse amenazado.
La modelo ucrania Anna Durítskaya, quien mantenía una relación con Nemtsov desde hace tres años y se encontraba con él cuando ocurrió el asesinato, voló anoche a Kiev, por recomendación de sus allegados, al no ser requerida más por los investigadores que llevan el caso.
El titular del Kremlin, Vladimir Putin, mandó una corona de flores y acudió en su nombre el representante presidencial ante la Duma, Garry Minj, mientras por el gobierno asistieron sólo dos viceprimeros ministros, Arkadi Dvorkovich y Serguei Prijodko, el titular de la cartera de Agricultura, Nikolai Fiodorov, y la directora de comunicación social, Natalia Timakova.
Llamó la atención la ausencia de los dirigentes de todos los partidos políticos de Rusia con presencia en la Duma, así como de diputados y senadores oficialistas.
Entre los extranjeros que vinieron a Moscú para asistir al funeral estuvieron el ex primer ministro británico, John Major, y el canciller de Lituania, Linas Linkevicius.
Rusia no concedió visa al presidente del Senado de Polonia, Bogdan Borusewicz, ni a la diputada del Parlamento Europeo por Letonia, Sandra Kalniete, por considerar no deseable su presencia en el país.
Al término de la ceremonia, el féretro de Nemtsov fue sacado a hombros, mientras un niño interpretó con violín una melodía fúnebre y una multitud lo despidió con aplausos y el grito de los héroes no mueren
.
Cabe destacar la admirable entereza que mostró, durante las cuatro horas que estuvo de pie junto al ataúd, la madre de Nemtsov, Dina Eidman, quien hoy 3 de marzo cumplió 87 años de edad.
A petición de la familia, el sepelio en el cementerio de Troyekurovo se realizó en la intimidad y asistieron sólo amigos cercanos.