Será en los próximos días cuando Uriel Adriano, campeón mundial de taekwondo, pueda reincorporarse al trabajo con sus compañeros, casi dos meses y medio después de haber sido sometido a una cirugía en el cuadríceps izquierdo.

Durante la Copa del Mundo por equipos, realizada en diciembre pasado en Querétaro, el competidor sufrió la lesión, que posteriormente lo obligó a ser operado, con el diagnóstico de que de cuatro a seis semanas estaría de vuelta, aunque en realidad es hasta pasados dos meses y medio que podría reiniciar el trabajo.

Adriano expuso que si bien no ha estado en algunos torneos que dan puntos para la clasificación directa a los Juegos Olímpicos Río 2016, la verdad es que ahora deberé ponerme las pilas para tratar de lograr la mayor cantidad de unidades y no estar con tanta desventaja respecto de los otros competidores.

Aunque sabe que deberá irse con cuidado, ya que si bien ahora ya se siente física y anímicamente en las mejores condiciones, sabe que las recomendaciones médicas posoperatorias siempre son de cuidarse lo más posible, no arriesgar para nada, sobre todo la zona donde se sufrió la lesión, porque podría haber oponentes que aprovechen esa situación.

Con algunos kilos de más –cuatro en categorías olímpicas y hasta ocho, si es la libre menos de 80 kilogramos–, que de ninguna forma representan un serio obstáculo para ponerse en forma en unos cuantos días, a Uriel le ocupa más su condición deportiva, que ha descuidado bastante, toda vez que no ha podido entrenar, correr ni hacer ningún esfuerzo, porque debe guardar casi total reposo para lograr su pronto restablecimiento.

Se mostró optimista de que pueda participar en las eliminatorias para los Juegos Panamericanos Toronto 2015 (Aguascalientes, 10-12 de marzo) y para el Mundial de la especialidad (Rusia, 16-23 de septiembre), aunque insistió en que prefiere no arriegarse de más para lograr su total recuperación y tal vez sacrificar ahora algunas competencias, para después obtener los mejores dividendos.