Diversas agrupaciones campesinas rechazaron la reciente propuesta para la reforma del agro que entregó la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).

No contiene elementos para la restructuración de la política pública ni metas de producción de granos básicos, y en cambio promueve la exportación hortofrutícola, es decir, se impulsa a los agricultores más capitalizados, señaló Marco Antonio Ortiz, integrante del Frente Auténtico del Campo.

Los 16 temas que se abordan en el documento, dice, son generalidades y no contiene compromisos del gobierno con las organizaciones de productores, sino que los remite a la creación de clústers (nuevas herramientas de trabajo) para ser exitosos; tampoco aborda los cambios propuestos para el Proagro. Sobre el financiamiento, sólo refiere que se ampliarán las ofertas de crédito por conducto de los intermediarios financieros y para las zonas de menor desarrollo.

En el caso del ordenamiento de mercados y la competencia, la Sagarpa insiste en que ya está funcionando el tablero de control para identificar la oferta y demanda de básicos por regiones, con lo cual se incide en el balance de productos. Sobre los insumos estratégicos, como las semillas, el gobierno propone la creación de empresas del sector social y privado en diversas regiones, elude la creación de empresas públicas –hay que recordar que desapareció la paraestatal Promotora Nacional de Semillas– y en relación con los fertilizantes, señala que se impulsarán inversiones en Pemex para que a finales de este año empiece la producción de agroquímicos.

Isidro Pedraza, dirigente de la Unidad de la Fuerza Indígena y Campesina (UFIC), comentó que no hay cambios sustanciales en materia de financiamiento, sólo se redujo a un dígito la tasa de interés, pero se siguen pidiendo garantías a los jornaleros.

El también senador apuntó que a los ejidatarios y minifundistas con bajos ingresos deberían otorgarles créditos a tasa cero y tomando sus cosechas como garantía, además de promover la industrialización y procesamiento de los alimentos. Hay muchos productos que no se industrializan, pues seguimos con la inercia de vender las materias primas, como cítricos, frutas y hortalizas, entre otros.

El Barzón señaló que no se atendió la petición de que Diconsa, DIF y fuerzas armadas compren directamente a los productores los alimentos no procesados que requieren, ni la propuesta de cambios profundos para el financiamiento al campo. Continúan las mismas inercias; sólo se ha cambiado el nombre a los programas.