Ramalá.

El presidente palestino, Mahmoud Abbas, ordenó ayer formar un comité que dé seguimiento a las demandas contra Israel que serán presentadas ante la Corte Penal Internacional (CPI), instancia a la que los palestinos podrán recurrir a partir del primero de abril.

El comité, encabezado por el negociador en jefe Saeb Erekat, estará compuesto por unas 40 personalidades políticas, profesores universitarios y activistas de derechos humanos, y se encargará de elaborar los documentos y expedientes que el Estado de Palestina presentará ante la CPI.

El 8 de julio de 2014 Israel comenzó una ofensiva militar aérea y terrestre de 50 días en la franja de Gaza que causó la muerte de más de 2 mil 100 palestinos, la mayoría civiles, y 70 israelíes, casi todos soldados. Las autoridades palestinas aseguran tener pruebas de crímenes de guerra y están en espera de los resultados de la investigación realizada por la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre el reciente operativo militar de Tel Aviv en Gaza, que serán divulgados en marzo próximo.

En otro asunto, los líderes de la oposición israelí pidieron al primer ministro de ese país, Benjamin Netanyahu, que cancele sus planes de pronunciar un discurso ante el Congreso de Estados Unidos, alegando que podría poner en peligro la relación de Israel con su aliado más importante.

En el más reciente golpe a las relaciones bilaterales, el vicepresidente estadunidense, Joe Biden, anunció que no asistirá al discurso planeado para el 3 de marzo, debido a que realizará viajes al extranjero no especificados.

Según la Constitución estadunidense, el vicepresidente actúa también como presidente del Senado, por lo que Biden habría tenido que asistir a la reunión conjunta del Congreso. Sin embargo, se sabe que el gobierno de Barack Obama está irritado porque Netanyahu hizo planes de hablar con los republicanos sin avisar a la Casa Blanca.

La Casa Blanca ha calificado el discurso de violación al protocolo diplomático y ha dicho que Obama no se reunirá con Netanyahu durante su visita. El líder del centrista partido Yesh Atid, Yair Lapid, dijo que el asunto del discurso está dañando gravemente las relaciones estratégicas de Israel con Estados Unidos.

En tanto, el ex jefe del Mossad, Shabtai Shavit, se unió a un grupo de ex altos funcionarios de seguridad para pedir a la administración israelí que haga más por buscar la paz con los palestinos.

En declaraciones al Canal 2 de la televisión israelí, aseveró que el gobierno debería aceptar el plan árabe de 2002, que ofreció una paz integral con el mundo árabe a cambio de un acuerdo con Palestina.