Martes 3 de febrero de 2015, p. 14
La avalancha de demandas de amparo que en los últimos siete meses de 2014 presentaron maestros de Michoacán contra las evaluaciones previstas en la nueva Ley de Educación estatal, vigente desde marzo de ese año, han comenzado a desvanecerse en los juzgados federales con sede en esa entidad, luego de que varios impartidores de justicia han coincidido en que la educación de calidad tiene prioridad sobre sus reclamos sindicales. El primer tribunal colegiado administrativo y del trabajo, con sede en Morelia, inicialmente resolvió que los jueces de distrito no pueden conceder suspensiones a los maestros de Michoacán que promuevan amparos contra dichas evaluaciones. Tras esa decisión, al menos cuatro juzgados han copiado los mismos argumentos, por lo que decenas de profesores que han solicitado amparos no pudieron detener la aplicación de sus evaluaciones.