La Escuela Superior de Medicina (ESM) del Instituto Politécnico Nacional (IPN) deberá someterse a evaluación en 2016 para conservar los espacios que tiene en hospitales para la formación de sus estudiantes. Y si porque no soy médico, no conseguimos la acreditación, en ese momento renuncio, aseguró el director de la institución, José Guadalupe Trujillo Ferrara.

El directivo es químico farmacéutico industrial con doctorado en ciencias químicas, es miembro del Sistema Nacional de Investigadores nivel III y fue designado en mayo pasado para dirigir la Superior de Medicina.

De acuerdo con miembros del Consejo Técnico Consultivo de la ESM, que Ferrara no sea médico pone en riesgo la obtención de la certificación que brinda el Consejo Mexicano para la Acreditación de la Educación Médica (Comaem).

En entrevista telefónica, Ferrara dijo que fue nombrado conforme a la normativa vigente del IPN y tiene una trayectoria profesional relacionada con las ciencias de la salud: desde 1981 es docente de la ESM y ha impartido 60 cursos a médicos sobre bioquímica. Además, señaló, de 2005 a 2011 fue director de posgrado de la Secretaría de Investigación y Posgrado del IPN.

También comentó que en la escuela se trabaja para que “cuando sea la evaluación estemos seguros de que procederá satisfactoriamente".

El Comaem evalúa desde hace 12 años a las escuelas de medicina. La  certificación actual de la ESM ante este organismo vence en noviembre de 2016. Desde mediados de 2015 la escuela deberá prepararse para su cuarto proceso de acreditación.

El primer paso es una autoevaluación que incluye satisfacer 60 estándares y 179 indicadores. Cuando estén seguros de que cumplen con la mayoría, solicitan la visita del Comaem, que es la segunda etapa del proceso, indicó en entrevista el secretario técnico del organismo, Juan Hernández Hernández.

El estándar número seis a considerar dice que el director (...) debe ser médico con estudios reconocidos, experiencia en educación médica, profesional y administrativa.

Ferrara “no es médico –dijo Hernández Hernández–, pero el Comaem no puede sancionar eso. (Al evaluar a la escuela) nos vamos a concentrar en el deber. El estándar dice que ‘debe ser médico’. Seguramente se hará acreedor a una recomendación que el IPN deberá cumplir. Pero el peso de ese criterio es uno de 179 indicadores”.

Añadió que el objetivo principal de la acreditación es la mejora de la calidad educativa y que lo importante es que el balance de los indicadores se cumplen y no tienda a elevar la calidad de la escuela y no a demeritarla.

También aclaró que entre las 111 instituciones públicas y privadas que el Comaem evalúa, ninguna escuela cumple al cien por ciento con los  estándares.

Tanto Truijillo Ferrara como Hernández Hernández mencionaron que otras escuelas donde se imparte la carrera de medicina no tienen médicos dirigiéndolas.

Aunque la ESM no cumpla con el estandar seis, podría obtener la acreditación del Comaem .

Hernández Hernández mencionó que hay situaciones de inestabilidad institucional, como la violencia, que hacen que las escuelas difícilmente cumplan con el objetivo de formar médicos de calidad,