Delegados sindicales acusan terquedad de los directivos de Grupo México, por no querer negociar
Emigración, pobreza y afectación generalizada de la actividad económica, entre las consecuencias
Lunes 19 de enero de 2015, p. 15
Siete años y seis meses cumplieron las huelgas de las minas San Martín, de Sombrerete, Zacatecas y de Taxco, Guerrero, y las partes nunca se han sentado a negociar. En los pueblos donde están asentadas las minas prácticamente la economía se fue a pique, muchos pobladores emigraron y cerraron los negocios relacionados con la actividad minera.
Las autoridades laborales del país nunca han acercado a las partes a dirimir el conflicto y, lejos de que se impulse un acuerdo o que haya vistos de un pronto arreglo, gremios opositores ahora impulsan la creación de un nuevo sindicato en Zacatecas y Sonora, en un intento más de afectar al Sindicato Nacional de Mineros que dirige Napoleón Gómez Urrutia.
Delegados sindicales de las dos minas señalan que las huelgas no se han resuelto debido a terquedad de los directivos de Grupo México de no querer negociar. Pues han preferido perder millones antes que cumplir con las demandas de seguridad e higiene por las que se iniciaron los paros
hace 90 meses.
Deserción escolar en Sombrerete
Luego de la paralización de la mina San Martín de Sombrerete, Zacatecas, se ha generado en esta zona pobreza, migración de trabajadores a otros estados e incluso a Estados Unidos, una afectación generalizada de la actividad económica de ese municipio e incluso deserción escolar, pues los trabajadores en paro no tienen ni para mandar a sus hijos a las escuelas, denunció la dirigencia de la sección 201 del Sindicato Nacional de Mineros.
Todo ello, agregó, a consecuencia de que Grupo México no se ha interesado en resolver las huelgas por la vía de la negociación. Este consorcio ha demandado en tres ocasiones la inexistencia de esta huelga, como también lo hizo con la de Taxco, Guerrero, y la de Cananea. También metió la mano para que sindicatos de la Confederación de Trabajadores de México y de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) buscaran la titularidad
.
Sobre el tema, el delegado del sindicato minero, Jesús Rodríguez, sostuvo que los trabajadores hacen un llamado a las instancias de los gobiernos federal y estatal correspondientes para que se termine de una vez este conflicto que no generaron los mineros, sino Grupo México
. Sostuvo que los obreros quieren regresar a laborar, pero los directivos de este consorcio, encabezados por Germán Feliciano Larrea, no están dispuestos a negociar una solución.
Arman sindicato a modo
Incluso, dijo, no han bastado las querellas legaloides para buscar desconocer la huelga
ni las disputas interpuestas para pelear la titularidad del contrato colectivo. Además ha habido enfrentamientos provocados por grupos de choque de militantes de la CROC y ahora los grupos disidentes están armando un sindicato a modo
para llamar a trabajadores a que dejen las filas del sindicato nacional de mineros. “Pero no van a poder, porque hay un convencimiento de los trabajadores de que la huelga es legal.
Esta sección demanda a las autoridades que por la vía legal se termine esta huelga, pues si prevalece es por la insensibilidad
del consorcio de Larrea.
Sobre la mina de Taxco, Guerrero, la dirigencia seccional informó que desde que se cumplieron los 7 años de esta huelga se tenía la promesa del ex gobernador del estado, Ángel Aguirre de que se iba a solicitar el conflicto, pues había pláticas entre el gobierno estatal y la Secretaría del Trabajo para impulsar una salida. Sin embargo, todo quedó en promesas de gobierno.
Refirió esta representación sindical que, en el caso de Taxco, Grupo México también ha interpuesto recursos para desconocer la huelga e incluso antes había demandando la terminación de las relaciones laborales, porque la mina se había agotado
, pero el gremio logró demostrar que era falso y había posibilidades de explotación para un cuarto de siglo más.
Las huelgas citadas, junto con la de Cananea, la cual se disolvió por maniobras legales de Grupo México, fueron iniciadas por las pésimas condiciones de seguridad e higiene que tenían las minas. Esa condición nunca ha sido subsanada ni revisada, asegura el sindicato nacional de mineros.