Vecinos de al menos cinco colonias se oponen a la construcción de un doble túnel de 1.5 kilómetros en Insurgentes-Mixcoac, con el cual sólo se busca desahogar el tránsito vehicular de los numerosos complejos habitacionales que se construyen en la zona, además de que se prevé talar más de mil 500 árboles. La obra, advirtieron, afectará los inmuebles aledaños, debido a que se requiere hacer una excavación muy profunda.

Al menos 150 vecinos se manifestaron ayer a mediodía, sin afectar la vialidad, en el cruce de Insurgentes y Circuito Interior, en demanda de información que documente la viabilidad del proyecto, que se prevé realizar en al menos dos años.

El ingeniero civil Enrique Fernández del Valle, vecino de la colonia Crédito Constructor, explicó que el proyecto implica mover tubería y meter túneles muy cerca de los edificios.

Hay una gran falta de claridad de las autoridades y por lo menos necesitamos que presenten argumentos de que su proyecto es el más idóneo. Tenemos más de un año solicitando información completa sobre la obra, aseguró.

Asimismo, habitantes de las colonias San José Insurgentes, Crédito Constructor, Insurgentes Mixcoac, Actipan, Acacias y Florida dijeron que la obra sólo beneficiará a 20 por ciento de la población que usa automóvil, sin que se consideren otras opciones de movilidad.

Esto se ha proyectado para dar acceso a los miles de automóviles que atraerán los inmuebles que se construyen sobre Insurgentes, entre Félix Cuevas y Barranca del Muerto, explicaron.

Los vecinos agregaron que el proyecto fue asignado a Grupo Hermes, que forma parte de Grupo GAMI y/o INDI SA de CV, que participaron en la construcción del segundo piso del Periférico y el nuevo edificio del Senado, en los que, acusaron, hubo fallas y sobrecostos.

Asimismo, dijeron que la obra implica realizar excavaciones a más de 30 metros de profundidad, junto al cauce de ríos entubados, que podrían afectar las cimentaciones de los inmuebles aledaños. Ello significa un enorme riesgo en una ciudad altamente sísmica y vulnerable a fenómenos meteorológicos, como las ahora llamadas lluvias atípicas, detallaron.

La protesta reunió a comités vecinales de otras demarcaciones que buscan una solución a sus problemas, como la construcción de una planta de asfalto en Coyoacán; la tala de árboles y desaparición de áreas deportivas en la Magdalena Mixhuca, y la afectación del pueblo de Santa Fe por la construcción del tren Toluca-México. Los afectados anunciaron que formarán un frente común vecinal para defender los espacios públicos de su comunidad.