Los Ángeles.

Adiós a los monitos de hombre y mujer. Un suburbio de Los Ángeles ha adoptado una norma para que los baños que dispongan de un solo compartimiento en empresas, restaurantes y lugares públicos se designen como de género neutral.

La ley, que entró en vigor esta semana en West Hollywood, requiere que los baños no estén restringidos con señales, diseños o instalaciones para uso de un sexo o género específico.

La nueva regla se aplica sólo a los baños de un solo compartimiento, no a los que tienen múltiples compartimientos e instalaciones, West Hollywood, conocido en el ámbito local como WeHo, tiene una importante población gay y transgénero, y los miembros de su cabildo votaron en favor de la medida en junio de 2014.

Los baños para géneros específicos pueden ser incómodos y potencialmente inseguros para muchas personas cuya identidad de género cae fuera de las normas tradicionales, señalaron los concejales en la exposición de motivos, y añadieron que la ley beneficiaría también a discapacitados o que se desplacen con asistentes personales que han tenido que esperar en la fila un baño específico de género cuando otro para un género con el que no se identifican está vacío.

Las nuevas empresas deben adherirse de inmediato a la norma, en tanto las existentes, los restaurantes y los sanitarios públicos tienen 60 días para remplazar las figuras tradicionales con signos neutrales, y asegurar que sus baños estén disponibles para todos.

Los sanitarios específicos han resultados incómodos y aun peligrosos para personas transgénero. Según el diario Los Angeles Times, en la reunión del cabildo de West Hollywood en la que se adoptó la nueva ordenanza, Drian Juárez, miembro de la Junta Consultiva Transgénero, se refirió a un ataque cometido en 2010 contra un graduado transgénero en un sanitario de la Universidad Estatal de California en Long Beach. El estudiante fue empujado al compartimiento, donde le grabaron en el pecho la palabra eso.

Juárez describió a West Hollywood como una joya en la comunidad LGBT cuando la ciudad aprobó la norma. El año pasado, el cabildo emitió una condena formal al presidente de Uganda, Yoweri Museveni, por firmar la controvertida ley antihomosexual de su país. Y en 2013 los propietarios de bares de WeHo derramaron en público botellas de vodka Stolichnaya en protesta por la adopción de legislación antigay en Rusia.

Funcionarios han expresado la esperanza de que otras ciudades promulguen legislación comparable en relación con los sanitarios públicos. La ciudad de Washington aprobó una norma similar en 2006. El año pasado, Filadelfia puso en vigor una ordenanza para que los edificios nuevos o remodelados incluyan sanitarios de género neutral, en tanto el presidente del condado de Multnomah, en Oregon –que incluye gran parte de la ciudad de Portland–, emitió una orden ejecutiva para que se instalen sanitarios de género neutral en todos los edificios del condado. Más de 150 universidades también cuentan con sanitarios de ese tipo, según cifras del Centro Stonewall de la Universidad de Massachusetts en Amherst.

En San Francisco se acaba de promulgar una ley que permite a las gasolineras ofrecer sanitarios unisex para los clientes. En 1986 la ciudad adoptó una ordenanza que obligaba a esos negocios a proporcionar sanitarios separados para hombres y mujeres; la semana pasada, el Consejo de Supervisores aprobó por unanimidad la reforma de esa ley. Las nuevas normas permitirán a los dueños de gasolineras ahorrar dinero y liberar espacio, y ofrecer al mismo tiempo instalaciones de género neutral.

© The Independent

Traducción: Jorge Anaya