Zacatecas, Zac.

Los nanotubos de carbono están siendo abandonados por algunos sectores de la industria a escala global al surgir indicios de que provocan daños a la salud, similares a los causados por el asbesto que afecta los pulmones, denunció el investigador catalán Jordi Díaz en el seminario iberoamericano de nanotecnologías realizado en esta ciudad.

El investigador de la Universidad de Barcelona opinó que los gobiernos deberían regular en forma estricta el desarrollo de nanotecnologías y sus productos, con el mismo interés que se da, por ejemplo, a los transgénicos.

En el primer seminario iberoamericano Diálogos sobre las Nanotecnologías, realizado en la Unidad de Estudios del Desarrollo de la Universidad Autónoma de Zacatecas, Díaz señaló que en la Unión Europea se toman medidas para vigilar el desarrollo de las nanotecnologías. “Se hizo una inversión muy fuerte en lo que se llama Nano City Cluster, que se dedica a la investigación en nanoseguridad, y uno de los equipos de trabajo es el de toxicidad.

En mayo del año pasado se realizó en Turquía la reunión denominó Nanotox, en la que se presentaron trabajos sobre repercusiones de las nanopartículas y su toxicidad. En ese punto la Unión Europea ha hecho una apuesta muy importante, muy positiva.

Agregó que en esa región han procurado desde el principio realizar estudios sobre el impacto en la salud de las nanotecnologías.

Sin embargo, admitió, tenemos casos como el mercurio, el amianto, el paladio, el cromo, el cobalto, entre otros materiales, que sabemos que son muy tóxicos a largo plazo y se siguen utilizando, aunque en cantidades tan pequeñas que se estima no generarían un problema.

Respecto de la regulación global en el área, el investigador señaló que “estamos en una suerte de impasse, en el que la reglamentación está a punto de salir; sin embargo por el momento hay una especie de vacío legal, que aprovechan ciertas empresas para sacar sus productos al mercado.

A escala global, aún estamos en un limbo jurídico para determinados asuntos, como una definición internacional sobre qué son los nanomateriales, cómo se deben medir y aplicar, etcétera.

Algo inquietante, destacó, es que el país que produce más artículos científicos relacionados con las nanotecnologías es China, y en el mundo occidental tenemos varias interrogantes, porque además muchos productos se fabrican en esa nación, en la que la regulación es menos estricta.

Sector privado

Otro de los participantes fue el investigador uruguayo Guillermo Foladori, quien señaló que los tres países con mayor desarrollo en la materia en América Latina son Brasil, Argentina y México, y es en este último donde el gobierno no ha invertido prácticamente recursos para el avance de esa área.

Además, señaló, en América Latina lamentablemente 80 por ciento de los desarrollos de nanotecnologías se hace en las grandes corporaciones privadas. Y debe considerarse también que México está atado al Tratado de Libre Comercio para América del Norte y eso lo mantiene muy atado a lo que se hace en Estados Unidos.

Esto provoca que la inversión en nanotecnologías se oriente al desarrollo de productos de mercado para su comercialización global, y no se destine a la salud, el agua y el bienestar social.

“Esto no es privativo de América Latina; también sucede en los países desarrollados, porque el grado de concentración de capital privado es tremendo.

Más de 80 por ciento de la producción actual de nanotubos de carbono se concentra en menos de 10 grandes corporaciones mundiales.