Cancún, QR., 24 de octubre.

Viajes de esperanza es una producción mexicana rodada en Cancún, Playa del Carmen, Tulum y Akumal, la cual se estrenará en los cines de México el jueves 6 de noviembre.

La película es un llamado a la unión en favor de la vida y la luz en las personas. Es una historia de amor que urge al respeto por la Tierra y que invita a reflexionar sobre la simplicidad. Asimismo, cuestiona la manera de pensar y vivir la vida.

La cinta se desarrolló en la costa del mar Caribe mexicano, en la ciudad maya de Tulum, la única construida junto al mar.

En esa maravillosa localidad de aguas cristalinas y arena blanca, el director, productor y guionista Luis Chávez, acompañado por un equipo de profesionales, grabó la película, una novedosa y fresca idea que expresa mensajes muy positivos.

El largometraje mexicano es protagonizado por Carolina Morán, conductora de televisión y Miss México 2006, quien interpreta el papel de María. La joven actriz comentó que le gustaría vivir en Tulum, por sus grandiosas bondades.

Mensaje optimista

Con un récord de grabación de cuatro semanas, la obra muestra las imponentes bellezas naturales de Tulum y Playa del Carmen, sus costumbres, la cultura maya y sus zonas arqueológicas, de gran interés para los turistas.

Es una historia de fe, espiritualidad y amor, basada en el fin y el inicio de la nueva era que anuncia la cultura maya, tomando en cuenta el medio ambiente y resaltando las bellezas naturales y cultura de la región.

Se trata de una propuesta cinematográfica que invita a la reflexión; es un proyecto totalmente mexicano que pretende rescatar lo más simple del ser humano y motivar el despertar de la conciencia.

Diego (David Negrete), joven y exitoso abogado comprometido con la hija de su jefe, es enviado al Caribe mexicano (Tulum) para apropiarse ilegalmente de las tierras de los pescadores, quienes las trabajan y protegen de la urbanización.

María (Carolina Morán), encantadora caribeña que trabaja en el hotel donde Diego se hospeda, llamará su atención, no sólo por su figura, sino por los valores y el sentido de la vida que le enseñará durante su viaje.

Diego abandona su insaciable sed de poder y dinero, y quedará envuelto en un dilema entre su pasado inmediato, ligado al mundo material, y la oportunidad de encontrar su naturaleza en el amor.

Viajes de esperanza es la oportunidad para hacer una pausa en el camino y recapacitar sobre el verdadero sentido de la vida y su entorno.