Fue un año bueno en el que me fue bien, nada más..., dijo con una sonrisa la clavadista Paola Espinosa, consciente de haber terminado la temporada sin haber ganado ni una medalla, y segura de que, recuperada de su lesión de columna casi totalmente, ha iniciado la preparación y pronto empezará a entrenar en pos de la ansiada presea olímpica individual en los Juegos de Río 2016.

Tuve una lesión que no me dejó hacer muchas más cosas, pero creo que estoy contenta porque me demostré que aún así puedo puedo estar dentro de las seis mejores del mundo, dijo la atleta, quien fue ponente en un congreso de deporte en el que se destacaron inquietudes de jóvenes frente a la sustentabilidad y la seguridad en los escenarios de competencia.

La campeona del orbe en plataforma en 2009 y múltiple medallista en competencias de Serie Mundial –circuito en el que este año no subió al podio–, tras recrudecerse su lesión crónica de columna anunció que no participaría en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz y que modificaría una parte de su preparación, la cual amplió con la asesoría del cubano Pedro Gato.

“Ahora me siento bien físicamente. Hemos recuperado esa fuerza que después de Londres (Olímpicos de 2012) no tenía y ahorita lo estoy haciendo. Creo que es muy buen tiempo.

Lo importante es el próximo año, cuando buscaré mi pase a los Juegos Olímpicos y sería un sueño más cumplido, porque se trataría de mi cuarta justa veraniega, señaló Espinosa, quien destina parte del tiempo a su fundación, mediante la cual intenta combatir la obesidad y el acoso infantil.

No le inquietan los recientes éxitos de las juveniles y sí aprecia la evolución en su deporte, y desde ahora tiene definido que a los clavados sincronizados, en la Serie Mundial 2015, irá con Dolores Hernández, en tres metros, y con Alejandra Orozco en 10.

Dijo que además admira la forma en que destacan las nuevas exponentes, como su paisana bajacaliforniana Gabriela Agúndez, quien a sus 14 años consiguió el pase a los JCC de Veracruz.

Me parece que el nivel es cada vez más fuerte y eso me gusta, porque nos exige entrenar más y estar concentrados en cada competencia, porque con cualquier descuido nunca sabes qué puede pasar en las competencias, dijo.