Cada 10 meses se rota a los mil 100 elementos asignados en siete municipios
Es el único compromiso presidencial
para renovar la estructura policiaca: Vargas Suárez
Lunes 13 de octubre de 2014, p. 14
En diciembre de 2012, la Secretaría de Marina implementó un novedoso y ambicioso programa de seguridad pública en el estado de Veracruz, el cual busca no sólo reducir los índices delictivos, sino también apoyar la creación de una policía capacitada y que cuente con las condiciones sociales y tecnológicas necesarias para convertirse en una corporación modelo a nivel nacional.
En entrevista con La Jornada, el vicealmirante Rubén Alfonso Vargas Suárez, jefe de la unidad de coordinación para el cumplimiento del compromiso presidencial para mantener la presencia de la Policía Naval en Veracruz, precisa que la decisión del presidente Enrique Peña Nieto de que elementos de la Armada de México (mil 100 elementos) asumieran por completo las funciones de seguridad pública en siete municipios veracruzanos es, hasta ahora, el único compromiso presidencial
para renovar la estructura policiaca en una entidad federativa.
Vargas Suárez afirma que en lo que va de la presente administración, los índices de delitos de alto impacto
se han reducido en 40 por ciento de diciembre de 2012 a la fecha, salvo el secuestro, donde los resultados no han sido los esperados.
Los marinos que se incorporaron a la Policía Naval provienen de todas las unidades operativas del país, pero su comisión dura 10 meses, además de que hay una rotación constante en los puestos para evitar posibles actos de corrupción. Los marinos tienen el aliciente de que, además de los haberes que reciben por ser miembros de la Armada de México, reciben un bono adicional del gobierno de Veracruz.
Al término de su comisión, casi todos los marinos regresan a sus unidades, salvo un pequeño grupo de oficiales que es el encargado de darle continuidad al proyecto.
El vicealmirante Vargas Suárez precisa que la Policía Naval opera en dos frentes, la región norte (que incluye los municipios de Veracruz y Boca del Río) y la región sur (Coatzacoalcos, Minatitlán, Cosoleacaque, Nanchital de Lázaro Cárdenas del Río y Acayucan).
Subraya que la cooperación de la Armada no se limitó a sustituir a los agentes municipales y avanzar hacia la creación de una policía de mando único en la entidad. Colabora también en la capacitación de los nuevos oficiales y creó un ambicioso programa para que la nueva generación de agentes (egresados de la Academia de Policía de Veracruz) sustituyan paulatinamente a los marinos hasta que estén en condiciones de asumir por completo el control de las corporaciones.
Cuestionado sobre la fórmula para crear corporaciones policíacas honestas y profesionales, el vicealmirante subraya que además de dotar a los nuevos elementos con el equipo material y tecnológico (como las cámaras de video), de capacitarlos en la recopilación de información y producción de inteligencia, de imbuirles valores morales y de compromiso con la sociedad, así como de adiestrarlos en un régimen militarizado de disciplina y respeto, los nuevos elementos, al igual que los integrantes de las fuerzas armadas, deben gozar de buenos salarios y prestaciones económicas, de instalaciones dignas y confortables, además de la posibilidad de desarrollar una carrera profesional que les asegure un trabajo estable y una pensión suficiente cuando pasen a retiro.
El gobierno de Veracruz, apuntó, se comprometió a dotar a nuestros elementos del equipo material y técnico para hacer su trabajo, pero también tiene la encomienda de garantizar los recursos necesarios para la seguridad pública.
Adelantó que en breve el gobierno de Javier Duarte de Ochoa dará a conocer la creación del comité de manejo del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP) que se encargará del transparentar el manejo de los recursos destinados a este propósito. Subraya el vicealmirante que son pocas las entidades que han creado este tipo de mecanismo, lo cual es muy loable.
La Secretaría de Marina elaboró un detallado plan con objetivos y parámetros claros para conocer el avance de su participación en Veracruz, con el propósito de que en 2016 –cuando termina la gestión de Duarte– se lleve a cabo un balance con resultados tangibles, que tendría como meta fundamental que los nuevos policías de los siete municipios referidos ocupen los mandos medios de las corporaciones para sustituir paulatinamente a los marinos comisionados.
Aunque no descartó que la presencia naval en la entidad continúe –de llegar a un nuevo acuerdo el próximo gobierno veracruzano y el gobierno federal– hasta el año 2018, cuando termine este sexenio.