Investigadores nacionales y extranjeros se reunieron recientemente para sentar las bases sobre las cuales se dará la construcción del Centro de Investigación sobre el Envejecimiento del Distrito Federal, que se espera esté terminado en 2016 y cuyos objetivos son la investigación básica sobre la biología del envejecimiento, así como las enfermedades degenerativas inherentes a esa etapa de la vida.

La historia del centro, impulsado por la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación (Seciti) del Distrito Federal (DF), con apoyo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y la Sociedad Max Planck, entró a un nuevo capítulo que tiene qué ver con el resultado de las reuniones de un grupo de investigadores que aceptaron trabajar en una comisión que definirá la ruta que debe seguirse, tanto en el ámbito de la investigación científica, como en la social.

La sede estará en Santa Fe

El encuentro se dio la misma semana en que la Dirección General de Patrimonio Inmobiliario del Gobierno del DF entregó a la Seciti el predio (ubicado en Avenida Prolongación Santa Fe, esquina Joaquín Gallo, en la zona de corporativos de Santa Fe), donde se construirá este centro de investigación público de talla internacional.

Aunque faltan trámites burocráticos, el predio ya está asignado al centro de investigación.

Los pasados 30 de septiembre y primero de octubre se llevó a cabo una reunión de alto nivel en la que participaron el hasta hace tres meses, presidente de la Sociedad Max Planck, Peter Gruss; el director general del Conacyt, Enrique Cabrero Mendoza; el jefe de la oficina del Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Javier González Garza, y el secretario de ciencia capitalino, René Drucker Colín.

Acudieron, también, el Jefe de la Oficina de Enlace para América Latina de la Sociedad Max Planck, Andreas Trepte, y el director del Instituto Max Planck para la Biología del Envejecimiento, Adam Antebi.

La Max Planck es una de las sociedades de investigación no universitaria más prestigiosas del mundo; desde 1948 sus científicos han obtenido 16 premios Nobel en distintas ramas.

Inversión de 700 millones de pesos

Otro de los objetivos del centro será generar información que permita crear políticas públicas que eleven la calidad de vida de las personas mayores de 60 años, tanto en la ciudad de México como en el resto del país. Para su construcción se estima una inversión de alrededor de 700 millones de pesos, provenientes del Fondo Mixto Conacyt-Ciudad de México.

La Seciti y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnologá trabajan junto con la Sociedad Max Planck para hacer del centro una institución de talla internacional.