La 64 Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) estará marcada “por las asignaturas pendientes en materia de mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, destacó el subsecretario para Asuntos Multilaterales de la cancillería, Juan José Gómez Robledo.

Dijo que a la multiplicación de los focos de inestabilidad en Siria, que venimos arrastrando desde hace muchos años, donde el órgano responsable de aprobar medidas para restablecer la paz ha sido incapaz de hacerlo por el uso del veto por parte de dos miembros permanentes, se han sumado las crisis de Ucrania y, en fecha más reciente, la de Gaza.

A esto, dijo, debe añadirse lo que ocurre en África, no sólo en términos de conflictos regionales y subregionales, sino la crisis del ébola, que está planteando preocupaciones en términos de seguridad internacional, pese a los ingentes esfuerzos de la Organización Mundial de la Salud.

Señaló que las actividades del presidente Enrique Peña Nieto durante la semana previa a la asamblea general empiezan este lunes con la conferencia mundial sobre pueblos nativos, la primera en su género para evaluar el grado de cumplimiento de la declaración sobre los derechos de los indígenas, que fue aprobada en 2007, destacó.

“Esta conferencia no tiene el apoyo de toda la membresía –de la ONU–, seamos francos; algunos actores muy importantes tienen reticencias frente a esa agenda e incluso han querido minimizar el papel de las comunidades originarias en las discusiones de la ONU, equiparando ese papel al de una organización no gubernamental. Peña Nieto hablará en nombre de América Latina y del Caribe”, precisó.

El miércoles, el Ejecutivo recibirá de Indonesia la presidencia de la alianza para un gobierno abierto, señaló.