Washington, 10 de septiembre.

El presidente estadunidense, Barack Obama, anunció esta noche que ampliará sus ataques aéreos a Siria, y advirtió que no vacilará en adoptar acciones contra el Estado Islámico de Irak y Levante (conocido como Isil, y que se autombró Estado Islámico, EI). Dijo que cuenta con la autoridad para emprender esta estrategia, y aseveró que hay apoyo bipartidista para combatir a los yihadistas.

En un mensaje a la nación de menos de 15 minutos, en el que expuso su estrategia contra el Isil, el mandatario demócrata anunció que ordenará expandir significativamente la campaña militar contra los yihadistas sunitas, con medidas que incluyen continuar y ampliar los bombardeos contra sus posiciones en Irak, enviar 475 nuevos asesores militares a dicha nación y entrenar y armar a los rebeldes moderados que intentan derrocar al gobierno del presidente sirio, Bashar Assad, desde 2011.

No vacilaré en adoptar acciones contra el EI en Siria, así como en Irak, expresó el presidente. Agregó que ordenará expandir significativamente la campaña contra los militantes sunitas en Medio Oriente, lo que incluye bombardeos aéreos en Siria.

Casi un mes después de ordenar bombardeos aéreos en Irak, Obama subrayó que las acciones que propone para erradicar el cáncer de los yihadistas no contemplan el envío de tropas, y subrayó que no serán iguales a las guerras de ocupación en Irak y en Afganistán, de donde el ejército estadunidense ya se replegó.

Insistió en que aunque seguirá habiendo riesgos para los efectivos que sean enviados a Irak, en esta ocasión los soldados no se enfrascarán en combates e irán exclusivamente como asesores, para entrenar y apoyar a las fuerzas nacionales que luchan contra el avance del Isil.

Se hacen llamar Estado Islámico. No son islámicos, ninguna religión admite el asesinato de inocentes, y la mayoría de sus víctimas son musulmanes. Tampoco son un Estado, pues no son reconocidos por ninguna nación, señaló Obama. Agregó que dicho grupo se originó como una filial de la red Al Qaeda en Irak.

Los asesinos del Isil son únicos en su brutalidad. Amenazan con un genocidio al perseguir y asesinar a musulmanes y a minorías religiosas, al violar y obligar al matrimonio a mujeres. Mataron bárbaramente a dos periodistas estadunidenses, recordó, en alusión a James Foley y Steven Sotloff, cuyas decapitaciones, a manos de un verdugo que hablaba con acento inglés en nombre de los yihadistas, circularon en Internet.

El presidente enfatizó que el combate a los yihadistas deberá ser un esfuerzo de naciones aliadas lideradas por su país. Afirmó que combatientes del Isil provienen tanto de Estados Unidos como de Europa, y que se corre el riesgo de que alguno de sus ciudadanos regrese a su territorio y ejecute un atentado. Washington liderará una coalición internacional que perseguirá donde quiera que esté al grupo yihadisa, afirmó.

Nuestro objetivo es claro. Degradaremos y, en última instancia, destruiremos al Isil mediante una estrategia antiterrorista integral y sostenida, proclamó Obama, quien recalcó que como comandante en jefe mi máxima prioridad es garantizar la seguridad de los estadunidenses.

Para lograr ese objetivo, Estados Unidos y sus aliados llevarán a cabo una campaña antiterrorista firme y sin descanso con el fin de sacar al Isil de donde quiera que esté, utilizando nuestro poder aéreo y nuestro apoyo a las fuerzas aliadas sobre el terreno.

Tras ser criticado hace dos semanas por decir en una conferencia de prensa que no tenía una estrategia para combatir a los yihadistas en Siria, Obama presentó un plan para que su país se encargue de armar y entrenar a los rebeldes sirios moderados, e indicó que Arabia Saudita aceptó alojar en sus bases militares a dichas tropas estadunidenses.

Recordó que en Irak, la fuerza aérea de su país ha ejecutado unos 150 ataques exitosos para recuperar territorio y con ello salvar miles de vidas. Insistió en que la ayuda a Irak se condicionó a que en el país se formara un gobierno de unidad nacional y lo hicieron en estos días. Por lo tanto, dijo, la aviación estadunidense seguirá con su campaña de bombardeos para apoyar el avance del ejército iraquí.

No nos veremos arrastrados de nuevo en una guerra terrestre en Irak, insistió.

Esta campaña de combate al terrorismo se llevará a cabo como un esfuerzo sostenido e incansable para destruir al Isil donde quiera que se encuentre, usando nuestro poderío aéreo y el apoyo a nuestros aliados en las fuerzas armadas iraquíes. Esta estrategia de acabar con terroristas que nos amenazan y, simultáneamente, apoyar a nuestros aliados en el frente de batalla, es la misma que hemos llevado a cabo con éxito en Yemen y Somalia durante años.

En cuanto a la situación en Siria, Obama detalló: al otro lado de la frontera hemos incrementado nuestra asistencia militar a la oposición sira. Esta noche, hago un llamado al Congreso para darnos autoridad adicional y aprobar los recursos necesarios para entrenar y equipar a estos combatientes. En la lucha contra el Isil no podemos confiar en el gobierno de Assad, que aterroriza a su pueblo, un régimen que nunca recuperará la legitimidad que ha perdido. En vez de eso, debemos fortalecer a la oposición, en la que se encuentra el mejor contrapeso a los extremistas del Isil, mientras se busca una solución política necesaria para resolver la crisis en Siria de una vez por todas.

Como último punto de su estrategia, aseveró que su país seguirá dando asistencia a los civiles inocentes que se han visto desplazados por la violencia, lo que incluye a musulmanes sunitas y chiítas, así como a decenas de miles de cristianos y a miembros de otras minorías religiosas que no permitiremos sean echados de sus tierras milenarias.

Obama señaló que un día antes del 13 aniversario del ataque contra las Torres Gemelas y el Pentágono, el país está más seguro, tiene una tasa de desempleo a la baja, ha liderado la oposición a Rusia y la defensa de Ucrania, y sus médicos logran enormes avances en la búsqueda de la cura del virus del ébola.