Permanece en la atmósfera hasta un siglo
Jueves 14 de agosto de 2014, p. 39
Las emisiones de hollín o carbono negro que emiten los vehículos a diésel, los incendios forestales y el combustóleo se debe contralar para proteger la salud pública y son de los contaminantes que ocasionan el calentamiento global, sostuvo Rodolfo Lazy Tamayo, subsecretario de Planeación de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Luego de participar en la inauguración de la 37 y 38 reuniones del Consejo Ejecutivo y 22 Conferencia de las Partes del Instituto Interamericano para la Investigación del Cambio Global el funcionario explicó que el hollín, también conocido como carbono negro, tienen un potencial mayor para calentar la atmósfera que el bióxido de carbono, ya que es 3 mil 200 veces más potente.
Explicó que esto hace que sea más peligroso, ya que a diferencia del bióxido de carbono, que permanece en la atmósfera hasta un siglo, el hollín se mantiene días, meses o años. El potencial del hollín o contaminantes de vida corta para absorber el calor es mucho mayor al del carbono, por lo que de disminuir su emisión, habrá mayores efectos que reducir una partícula de bióxido de carbono en 20 años.
En el encuentro, agregó, se evaluará la vulnerabilidad del país y el mundo ante los fenómenos hidrometeorológicos, como huracanes y sequías, que están asociadas al cambio climático.