Aumentarán el bienestar de los mexicanos
, dice el PRI
Con la reforma energética se procura progreso y desarrollo: PAN
Se dio un golpe de Estado legislativo
, afirma Alejandro Encinas
Jueves 7 de agosto de 2014, p. 5
Tres meses después de que el presidente Enrique Peña Nieto remitió las iniciativas a ambas cámaras del Congreso, el Senado concluyó anoche la discusión de las 21 leyes reglamentarias de las reformas a los artículos 25, 27 y 28 constitucionales, por las cuales se abre al capital privado, nacional y extranjero, la explotación del petróleo y la producción y comercialización de energía eléctrica.
En el pleno del Senado, los grupos parlamentarios debatieron durante más de 110 horas para terminar a marchas forzadas la aprobación de los seis dictámenes que engloban las leyes reglamentarias.
Después de que las leyes de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria y General de la Deuda Pública se remitieon al Ejecutivo federal para su promulgación, el senador perredista Alejandro Encinas advirtió que éste es uno de los momentos de mayor ignominia del país
, ya que se dio un golpe de Estado legislativo
que rompe con el pacto social que resultó del Constituyente de 1917.
El coordinador de la bancada del PRD, Miguel Barbosa, advirtió a su vez que no esperarán sentados en sus escaños a ver cómo hunden al país
, ni van a esperar pasivos el juicio de la historia, sino que buscarán revertir la reforma.
Destacó que el modelo energético aprobado tendrá el mismo resultado que en su momento tuvo la privatización del ejido, los ferrocarriles, las telecomunicaciones y otras cosas que se entregaron al capital privado en aras de la productividad y han sido un rotundo fracaso.
En tanto, el senador Manuel Cavazos Lerma, del PRI, afirmó que gracias al talento y el patriotismo del Congreso hoy concluye una etapa de profundas reformas constitucionales
, entre ellas la energética, cuyas leyes secundarias aumentarán el bienestar de los mexicanos al maximizar la renta petrolera.
El priísta sostuvo que México no nació en 1938 ni en 1810, sino acaso en 1325, cuando un grupo de mexicas encontró un águila sobre un nopal
.
En nombre del PAN, el senador Salvador López Brito señaló: Aquí no hay mexicanos buenos o malos, puros o impuros, nacionalistas o desarraigados, que traicionan o no. Aquí estamos mexicanos que amamos entrañablemente a nuestra querida patria. Lo estamos haciendo por México
.
Agregó que la legislación procura el progreso, el desarrollo y la industrialización.
Lázaro Cárdenas del Río, más vivo que nunca
Los perredistas reivindicaron en todo momento la figura del ex presidente Lázaro Cárdenas del Río. Encinas, quien sintetizó el contenido de la legislación que, dijo, despoja al país del petróleo y otros recursos energéticos, además de tierras, aguas y bosques, afirmó que quien expropió los hidrocarburos está más vivo que nunca
.
Su compañera de bancada Dolores Padierna agregó que con esta reforma el presidente Enrique Peña Nieto superó a (Antonio López de) Santa Anna, ya que entregará todo el territorio a las siete hermanas
(en alusión a la frase acuñada por Enrico Mattei, fundador de la moderna industria energética de Italia, para referirse a las compañías anglosajonas que controlaban el petróleo de Medio Oriente después de la Segunda Guerra Mundial).
En la sesión plenaria, los perredistas exhibieron una figura de cartón, de cuerpo entero, del general Lázaro Cárdenas y desplegaron una manta con extractos del Canto General, de Pablo Neruda: La promulgación de Ley del Embudo
, que leyó al final el senador Isidro Pedraza:
Ellos se declararon patriotas, en los clubes se condenaron. Y al fin llevaron al Congreso la Ley Suprema, la famosa, la respetada, la intocable Ley del Embudo. Fue aprobada. Para el rico, la buena mesa; la basura para los pobres. El dinero para los ricos, para los pobres el trabajo. El fuero para el gran ladrón, la cárcel para el que roba un pan.
La senadora Layda Sansores, del PT, lanzó 10 monedas desde la tribuna senatorial: Son 10 denarios
para los traidores, dijo, y acusó a priístas y panistas de celebrar la imposición.
Cerca de las 11 de la noche, cuando se aprobó el último dictamen, priístas y panistas aplaudieron su triunfo con frenesí.