Duro golpe para el gobierno de Renzi, que enfrenta desempleo y gigantesca deuda
Jueves 7 de agosto de 2014, p. 26
Roma, 6 de agosto
Italia cayó en recesión por tercera vez desde 2008, con una contracción del producto interno bruto (PIB) de 0.2 por ciento en el segundo trimestre, según datos de la agencia de estadísticas Istat, que derrumbaron los valores bursátiles de la tercera economía de la zona euro.
Los datos asestan un duro golpe al gobierno de centroizquierda de Matteo Renzi, que contaba con la reanudación del crecimiento para cerrar sus presupuestos, luchar contra el desempleo y contener la gigantesca deuda del país, confrontado a su peor crisis desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.
La contracción de 0.2 por ciento del PIB fue superior a las previsiones de los analistas, que se situaban en un abanico de -0.1 a 0.1 por ciento respecto al trimestre precedente, cuando había registrado ya un retroceso de una décima porcentual.
Esos resultados vuelven a sumir al país en la recesión, definida como dos trimestres consecutivos de contracción del PIB.
El respiro fue de corta duración, dado que el país había salido de la recesión en el cuarto trimestre de 2013, con un crecimiento de 0.1 por ciento, para cerrar el año con una contracción de 1.9 por ciento.
Con relación al segundo trimestre de 2013, la contracción de la economía italiana en el segundo trimestre de este año fue de 0.3 por ciento, indicó el Istat.
La bolsa de Milán acusó de inmediato el impacto, con una depreciación de su índice FTSE Mib, que llegó a superar 3.30 por ciento, aunque al cierre había limitado su caída a 2.70 por ciento.
El ministro de Economía Per Carlo Padoan dijo el miércoles a la cadena de televisión RAI que Italia no requeriría un presupuesto de emergencia, pese a las señales de que el crecimiento quedaría bajo las proyecciones sobre las cuales se basaron los planes de gastos e impuestos de 2014.
La manera de salir adelante es continuar con la estrategia del gobierno
, declaró, y agregó que era vital incentivar las reformas estructurales y la competitividad.
No hay presupuesto suplementario a la vista. El gobierno observa de cerca las finanzas públicas y no hay necesidad de otro presupuesto si se aplican controles de gastos
, sostuvo.
En declaraciones previas, Padoan ha señalado que Italia registraría un déficit presupuestario en 2014 dentro del límite de la Unión Europea, de 3 por ciento del PIB.