Un nuevo libro ha llegado a la Biblioteca de las Artes. Se trata del volumen autobiográfico con 93 grabados, 53 imágenes y 40 textos del artista Nahum B. Zenil (Chicontepec, Veracruz, 1947).

Ese material es la base de Páginas sueltas, exposición montada en el Centro Nacional de las Artes (Cenart), con motivo del aniversario 20 del complejo cultural.

Radicado en Tenango del Valle, estado de México, Zenil tenía varios años de no exhibir en forma individual en la ciudad de México.

En 1999 montó su exposición El gran circo del mundo, en el Museo de Arte Moderno (MAM), donde se presentó el libro-objeto Páginas sueltas, y su currículum incluye muestras en la estación Zócalo del Metro y el Centro Cultural Veracruzano, así como en los museos Universitario del Chopo y de Arte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Tampoco ha dejado de participar en colectivas.

De acuerdo con Zenil, es la primera vez que se exhibe el libro completo, pues permanecía almacenado. Le da mucho gusto porque combina dos elementos que lo apasionan: la poesía y la plástica. Es lo que he estado haciendo en los tiempos recientes, ilustrando textos dizque poéticos.

El autorretrato como leitmotiv

Páginas sueltas recorre la vida del artista que ha hecho del autorretrato su leitmotiv, desde la etapa prenatal hasta la muerte.

Nahum B. Zenil trabajó el libro desde finales de los años 80 del siglo pasado a principios de los 90.

Los textos corresponden a una selección de los que venía escribiendo desde el tercer año de educación secundaria.

Los grabados se imprimieron con el apoyo de una beca del Fondo Nacional para las Artes (Fonca), obtenida en 1997. El tiraje completo consistió en 50 ejemplares numerados, 10 pruebas de autor y una decena de pruebas de taller.

Si estaban almacenados, el entrevistado lo atribuye al costo bastante alto del libro, ya que sus partes no se pueden vender por separado. Zenil expresa que le gustaría mostrarlos más que venderlos.

Respecto de la pasión por su persona, el artista dice haber empezado con este registro autobiográfico desde muy al principio de mi obra. Creo que ya en la etapa escolar había tocado en parte el tema. Al egresar de la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado La Esmeralda, mi primera exposición fue con obra abstracta en la Galería José María Velasco, en 1974. Luego, retomé la figura porque me interesaba contar lo que me sucedía interiormente.

Una de las obras de Nahum B. Zenil, en imagen incluida en el libro del artista que articula la exposición Páginas sueltasFoto cortesía del Cenart

Introspección incesante

–¿Estaba atormentado?

–Sí, allí empieza esta introspección, este autoanálisis, por esa necesidad de extrovertir mis sensaciones, mis sentimientos. Hasta la fecha continúo haciéndolo, porque esta búsqueda interior no ha terminado.

Aunque Zenil no ha encontrado del todo lo que buscaba, ha podido canalizar sus sentimientos por medio de su obra plástica y sus escritos. Desde hace 10 años forma parte de un taller de creación literaria en Tenango del Valle, que coordina junto con Enrique Villada, poeta y biógrafo de este otrora profesor normalista.

“Ahora, con mayor conciencia, escribo con una intención más clara de hacer poesía. Estos textos (los de Páginas sueltas) son tal vez literariamente pobres, pero son una constancia de ese paso mío a través del tiempo que me ha tocado vivir”, señala.

El libro está realizado sobre papel hecho a mano, de la fábrica De Ponte, ya que se acomoda muy bien a la técnica mixta que utilizo. Si el artista no realiza la parte técnica de sus grabados es porque le hacen daño los solventes.

Zenil, quien se considera más dibujante que pintor o grabador, dice: Mis obras son realmente dibujos coloreados, porque la figuración se presta muy bien para contar.

La apertura de la exposición estuvo a cargo de Álvaro Rodríguez Tirado, director general del Cenart, y Beatriz Vidal, directora de la Biblioteca de las Artes. Enrique Villada expresó que la obra de Nahum ilustra este viaje en el que el hombre cae y se levanta; los temores, los anhelos, la luz y la sombra, el tiempo. Toda su obra es una especie de diario que revela acontecimientos diversos. Tienen esa atmósfera de los sueños porque surgen de lo más profundo, de la vida que sigue escribiéndose. Al mismo tiempo son un homenaje al libro, a los antiguos códices donde confluyen tres personajes prominentes de la cultura: el poeta, el pintor, el sabio.

Páginas sueltas tendrá permanencia en la Galería Juan Soriano, de la Biblioteca de las Artes, hasta el 10 de agosto. El Cenart se localiza en Río Churubusco 79, esquina con calzada de Tlalpan, colonia Country Club, cerca de la estación General Anaya del Metro.