El silbante Flores perdonó la tarjeta roja al guerrero Ribair Rodríguez
Domingo 20 de julio de 2014, p. a13
Veracruz, Ver., 19 de julio.
El técnico Cristóbal Ortega tuvo una mala presentación con el Veracruz, que perdió 0-1 ante Santos en su estadio Luis Pirata Fuente, en la primera fecha del torneo Apertura 2014.
Los Tiburones Rojos desaprovecharon la localía en una campaña en la que están involucrados en problemas de descenso. El timonel presentó un equipo remozado respecto de la campaña anterior que dominó la mayor parte del encuentro, pero el delantero Carlos Ochoa falló varios tiros para rescatar por lo menos un empate.
Por su parte, con el entrenador Pedro Caixinha en la tribuna por suspensión, los Guerreros aprovecharon una de las pocas oportunidades que tuvieron y se llevaron los tres puntos con tanto del colombiano Andrés Rentería, al minuto 42.
Veracruz se presentó con un cuadro renovado, pero la tripleta técnica formada por Ortega, Juan Antonio Luna y Carlos Reinoso no pudo acoplar bien las líneas, sobre todo en la zona defensiva donde el equipo dio muchas facilidades.
El árbitro Miguel Flores tuvo una mala actuación, ya que apenas al 10 perdonó la expulsión del santista Ribair Rodríguez, quien propinó una plancha a Édgar Andrade, pero sólo le mostró cartón amarillo. Un minuto después Javier Orozco falló una oportunidad, cuando no pudo puntear el esférico a un metro de la línea de gol, tras un centro de Carlos Quintero.
El único tanto del partido fue al minuto 42, en una gran combinación santista que culminó con disparo lejano y rasante de Rentería, ante una tardía reacción del arquero Melitón Hernández, quien alcanzó a tocar el balón.
En el complemento Santos se dedicó a sobrellevar la ventaja, mientras Ochoa cometió varios yerros. El primero, al 59 cuando llegó de frente a la portería y estrelló su cabezazo en el palo derecho del juvenil guardameta Julio González. Luego volvió a fallar en remates al 72 y 90.
A siete minutos del final debutó en el futbol mexicano Djaniny Tavares, pero el delantero de Cabo Verde casi no tuvo contacto con el esférico.