hora tiene 26 años, lo registraron con el nombre de Tom Neuwirth, pero en todo el mundo lo conocen como Conchita Wurst. Fue cantante de una banda de pop en Austria pero su fama rebasó fronteras al ganar el concurso Eurovisión en mayo pasado en Copenhague. En su ya larga trayectoria el concurso, visto por más de 100 millones de televidentes, ha impulsado talentos tan populares como ABBA o Celine Dion.

Conchita apareció en Eurovisión luciendo un ajustado vestido dorado, ojos hiper maquillados y… una suave barba para interpretar la canción Rise Like a Phoenix. Arrasó en las votaciones. Hoy es el travesti más popular, el personaje que despierta admiración por su talento musical, pero también hostilidad en varios países.

Por ejemplo en Rusia, donde el concurso es motivo de orgullo nacional. Putin enfureció y la Iglesia Ortodoxa denunció el triunfo de una drag queen por ser expresión de decadencia, de que El proceso de la legalización de aquello a lo que la Biblia se refiere como una abominación ya no es noticia en el mundo contemporáneo, y que por eso Conchita significa un paso más en el rechazo de la identidad cristiana de la cultura europea.

Fue lo menos que le dijeron, mientras políticos y organizaciones anti-gay pidieron prohibir sus actuaciones en el país. Cabe recordar que el Kremlin y el Patriarca de Moscú proclamaron a Rusia bastión moral contra la homosexualidad, el aborto y los matrimonios entre personas de un mismo sexo.

En cambio el cardenal de Viena felicitó a la drag queen barbuda por su triunfo pues en el colorido jardín de Dios hay una variedad de colores. No todos los que han nacido como seres masculinos se sienten como hombre, y lo mismo del lado femenino. Merecen como persona el mismo respeto al que todos tenemos derecho.

Hace una semana, Conchita refrendó su popularidad al encabezar en Madrid las celebraciones del Orgullo Gay, que reunió a dos millones de personas. Antes estuvo en celebraciones semejantes en Londres y Berlín. La diva austriaca  disfrutó el multitudinario recibimiento que le dieron y el premio por su lucha contra la discriminación. Además cantó al lado de otras figuras, como Ana Torroja y Marta Sánchez.

Aprovechó para aclarar que le agobia un poco cuando la gente me dice que me he convertido en un modelo para muchos, sinceramente no creo que sea un ejemplo para nadie o, por lo menos, no lo he intentado ser. Yo sólo he seguido mis principios y me muestro como soy.

¿Y qué sucede con Tom Neuwirth, el hombre que está detrás (o más bien dentro) de Conchita? Confiesa que él es muy tímido y perezoso. Así que yo tengo que hacer todo el trabajo. Y vaya que sí: es la diva invitada del desfile haute couture de Jean Paul Gaultier en París. Anteriormente lo fueron Amanda Lear, Rossy de Palma o Dita Von Teese.