Martes 8 de julio de 2014, p. 24
El último canciller de la extinta Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), Eduard Shevardnadze, figura clave en el fin de la guerra fría, falleció ayer a los 86 años, retirado de la política desde su renuncia a la presidencia de Georgia, en 2003.
Murió a mediodía
, indicó su asistente, Marina Davitashvil. Llevaba mucho tiempo enfermo
, añadió.
Shevardnadze tuvo un papel esencial en la Perestroika, restructuración lanzada a finales de los años 80 por el líder soviético Mijail Gorbachov con la intención de reformar el anquilosado sistema soviético, que concluyó en 1991 con el desmembramiento de la URSS.
Como ministro soviético de Relaciones Exteriores negoció tratados de desarme nuclear con Estados Unidos y facilitó los procesos de democratización de los países comunistas de Europa del este, que condujeron a la caída del muro de Berlín en 1989 y la posterior reunificación de Alemania.
Su final político fue menos glorioso: tras ser electo presidente de la Georgia independiente en 1995 tuvo que dimitir en 2003, en plena Revolución de las rosas, dejando al país caucásico sumido en la pobreza y al borde del caos.