Jueves 3 de julio de 2014, p. 25
Bagdad. El primer ministro iraquí, Nuri Maliki, ofreció una amnistía general para todas las tribus y personas que lucharon contra el gobierno, con excepción de quienes cometieron asesinatos. La oferta se produce tras fracasar una sesión parlamentaria para iniciar la formación de un gobierno, crucial para contrarrestar la ofensiva del Estado Islámico de Iral y el Levante (Isil). Asimismo, Maliki se opuso a que la región autónoma del Kurdistán conserve el control de los territorios en los que desplegó fuerzas en las últimas semanas para hacer frente a la ofensiva de los rebeldes. El ejército realizó avances para reconquistar la ciudad de Tikrit, en manos de los yihadistas.