La Habana, 30 de junio.

Un tribunal de La Habana juzgó por corrupción a tres empresarios canadienses y a varios funcionarios cubanos que podrían ser condenados en los próximos días a 20 años de cárcel, informó hoy el diario oficial Granma.

La fiscalía pidió para los principales acusados, el ex subtitular del desaparecido Ministerio del Azúcar, Nelson Ricardo Labrada Fernández, y el empresario canadiense Vahe Cy Tokmakjian, 20 y 15 años de prisión, respectivamente. Al resto de los procesados podrían dictarles entre ocho y 12 años, indicó el rotativo. La fiscalía exige además un pago por reparaciones de daños económicos al Estado por 91 millones de dólares.

Durante un juicio oral celebrado entre el 9 y el 21 de este mes hubo 17 acusados. El tribunal debe emitir una sentencia en los próximos días, según Granma.

Además de Tokmakjian están procesados los empresarios canadienses Marco Vinicio Puche Rodríguez y Claudio Franco Vetere.

Los 14 imputados cubanos pertenecían al desaparecido Ministerio de Azúcar, cuyas funciones fueron designadas a un grupo empresarial, y al también disuelto Ministerio de la Industria Básica. Además, a compañías estatales y a una institución cercana al Ministerio de Turismo.

Sobre todos pesaban cargos por corrupción. A Tokmakjian se acusó, entre otras cosas, de utilizar mecanismos fraudulentos y corruptores para obtener beneficios en las negociaciones con entidades cubanas y extraer del país ilícitamente cuantiosas sumas de dinero, detalló el diario.

Tokmakjian Group, con sede en Ontario, tenía en Cuba la representación del fabricante de automóviles sudcoreano Hyundai y contratos con varias empresas del sector transporte en la isla.

Por otro lado, el general retirdado Sixto Batista, quien ocupó altos cargos políticos y militares en Cuba durante más de medio siglo, murió en La Habana a los 82 años, reportó Granma.

La tarde de ayer, 29 de junio, falleció víctima de una penosa enfermedad el general de cuerpo de ejército de la reserva Sixto Batista Santana, aseveró el periódico al anunciar que el cadáver fue cremado.

Batista formó parte de la llamada generación histórica de la revolución cubana, que ya está desapareciendo por su avanzada edad.