El arte Queer actual, al hacer caso omiso a lo políticamente correcto, propone expandir el placer por todos los sentidos, convirtiéndose en fuente de emociones, pasiones e historias.

Además, mediante sus diversas facetas, permite explorar la ruptura de fronteras, dejando atrás tabúes, culpabilidades, prohibiciones y miedos.

Una de estas manifestaciones es el homoerotismo, el cual, generalmente a través del desnudo, lleva a la sexualidad más allá del cuerpo, pues abarca también las relaciones sicoafectivas y sus múltiples dimensiones.

Así explica el director de la galería Art Space México, Armando Martínez Medina, el sentido de la exposición La línea, el pene: retrato del hombre, inaugurada anoche en ese espacio, que se inscribe en la celebración del Día Mundial de la Diversidad Sexual (el sábado 28).

Participan los artistas Luis Carpizo, Francisco López y Jonathan Aldana, quienes presentan una serie de obras con las cuales pretenden compartir la idea de que el arte lo que puede es cambiar a las personas y a este país, pues el arte atraviesa todo lo que toca, despierta algo que estaba dormido en tu alma: eso es lo que pretendo, señala Aldana.

El pintor reconoce que sus temas son un poco complicados para las personas de mente conservadora, pero vivimos en una sociedad en la que es necesario plantearnos nuevas formas de vida y respetar a los demás, dejar de estereotipar y vivir felices, por eso necesitamos más artistas.

Jonathan Aldana, quien ha realizado estudios en la Academia de San Carlos y en el Centro Nacional de las Artes, ha participado en exposiciones en Nueva York con Help Gap, asociación encargada de ayudar a niños africanos afectados por el virus del sida.

Men in blue, trabajo de Jonathan Aldana, incluido en la exposición montada en Art Space México, recinto ubicado en la colonia Hipódromo CondesaFoto cortesía de la galería

Ser gay tiene que ver con una forma de vida que se acepte de muy joven, ha sido un camino cansado, difícil, en ocasiones solitario y de tratar mi obra, la cual es emocional, llena de colorido y testosterona, fracasos, dolencias, amores y sexo, puntualiza.

El galerista Armando Martínez añade que de manera paulatina se abren más espacios donde el arte Queer puede llegar a públicos cada vez más amplios.

“Los museos, las galerías y la sociedad en general, como productores de sentido, deben adecuarse a nuevas formas de discurso y análisis, deben preocuparse por despertar en el público el deseo de reflexionar sobre cuestiones más amplias y trascendentes que le afectan profunda y directamente. Asumiendo esa labor es que en Art Space México presentamos La línea, el pene: retrato del hombre”.

Luis Carpizo, otro de los expositores, es diseñador industrial por la Universidad Nacional Autónoma de México y documentalista. Su trabajo pictórico, fotográfico y multimedia ha sido presentado y expuesto en espacios como el museo Carrillo Gil, el Polyforum Cultural Siqueiros y las fototecas de Veracruz y de La Habana.

También exhibe sus trabajos Francisco López, nacido en Mérida, Yucatán, con una trayectoria de más de 20 años. Para él, la pintura siempre ha sido una necesidad casi fisiológica, indica.

Su obra revela un cuidadoso estudio del cuerpo humano, femenino y masculino, que acompaña con abiertas referencias a la cultura popular, en especial el cine, la música y la pornografía gay.

La exposición se puede visitar en Campeche 281, colonia Hipódromo Condesa). Terminará el 26 de julio.