reyes
Viernes 20 de junio de 2014, p. 22
La abdicación de Juan Carlos de Borbón en favor de su hijo provocó que se aprobaran de urgencia algunas leyes y medidas protocolarias, como el real decreto con el que se dio cobertura al nuevo estatus del monarca saliente. Juan Carlos y Sofía mantendrán el título de reyes
y se les deberá llamar su majestad
, con carácter honorífico y vitalicio.
Además, Juan Carlos mantendrá su rango militar de capitán general de las fuerzas armadas, pero pasará a la reserva, con lo que mantendrá su salario como tal.
La nueva familia real estará integrada por Juan Carlos, Sofía, Felipe VI, su esposa, la reina Letizia y sus dos hijas, la princesa de Asturias, Leonor, y la infanta Sofía. La hija mayor de los nuevos monarcas está llamada a suceder a su padre, siempre y cuando se reforme la Constitución que únicamente prevé a un hijo varón como sucesor a la corona.
Las dos hermanas del nuevo rey, Elena y Cristina, dejan de pertenecer a la familia real y tendrán el estatus de familia del rey
, con lo que perderán prebendas y responsabilidades. Esta decisión se adoptó, en gran medida, por los casos de corrupción que han salpicado a la familia real en los últimos años, sobre todo el protagonizado por la ex infanta Cristina y su esposo, Iñaki Urdangarin, investigado por desvío de recursos del erario.
En otro asunto, el supuesto hijo no reconocido de Juan Carlos de Borbón, Alberto Solá, anunció que ampliará la demanda contra su presunto padre para intentar que, una vez despojado de la corona, pueda responder a su reclamo de paternidad. Solá nació en Barcelona en 1956, con lo que sería el primogénito de Juan Carlos de Borbón, y según su propio testimonio, al nacer engañaron a su madre y le llevaron un bebé muerto para apartarlo de sus brazos. Fue entregado a una familia en Ibiza y recibió educación en Suiza y hasta un trato preferencia en el ejército, sin que él supiera la razón de fondo.
Solá sostiene que continuará su lucha por destapar la verdad sobre su origen, pero la legislación española le cerró todas las puertas hasta ahora, así como a otra supuesta hija no reconocida de Juan Carlos, una ciudadana belga de nombre Ingrid Sartiau, a la que ya conoció y con la que se hizo una prueba de ADN que arrojó un resultado de alta probabilidad
de que ambos sean hijos del mismo padre.
Sartiau nació en 1966, dos años años antes que Felipe VI.
La demanda se presentará en las próximas semanas, pero su admisión dependerá del grado de aforamiento que le otorguen al ex monarca, que todo indica que será total
, según adelantó el gobierno.