El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, advirtió que es necesario ampliar la corresponsabilidad entre la Federación y los estados para hacer efectiva la aplicación de la reforma constitucional de derechos humanos, única vía –dijo– para alcanzar la igualdad, la justicia y el desarrollo de un Estado que se digne de ser democrático.

Pidió además acelerar el paso en la aplicación de esta enmienda. Hoy el gran reto es que el contenido de la reforma se refleje cotidianamente en la vida de todas y de todos los mexicanos. El desafío que enfrentamos es equivalente a la profundidad del propio cambio constitucional, señaló.

Representantes de los tres Poderes de la Unión evaluaron los retos y avances de la puesta en marcha de la reforma en referencia. A tres años de su entrada en vigor (11 de junio de 2011) presentaron una perspectiva integral del Estado mexicano en la materia.

Olga Sánchez Cordero, ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, advirtió que no puede haber prosperidad económica ni normalidad democrática ni estabilidad social, sin el pleno respeto a los derechos humanos.

Creer que estos derechos obstaculizan la labor del gobierno significa apostar a la inseguridad, impunidad, desigualdad económica e injusticia, dijo.

La ministra aseveró que en el Poder Judicial de la Federación ya existe un cambio cultural, de actitud entre sus miembros, respecto de los derechos y libertades de las personas, por lo que aquí se ha pasado de la etapa de puesta en marcha a su normalización cotidiana. Destacó las restricciones aplicadas a instituciones jurídicas como el fuero militar o el arraigo.

Por parte del Poder Ejecutivo, Osorio Chong afirmó que hay una sensible disminución del número de quejas contra el gobierno federal, interpuestas en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

Sin embargo, admitió que es necesario difundir el contenido de la reforma; capacitar a funcionarios de todos los órdenes de gobierno para aterrizar las obligaciones que les impone la reforma del Poder Legislativo.

José González Morfín, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, subrayó que en esta etapa de puesta en marcha vamos a requerir voluntad política de los tres poderes de la Unión y de los tres órdenes de gobierno.