Empresas carcelarias lucran con migrantes
Jueves 12 de junio de 2014, p. 25
Nueva York, 11 de junio.
Agrupaciones de defensa de migrantes y de libertades civiles denunciaron abusos de autoridades contra menores de edad detenidos en el éxodo sin precedente de niños de México y Centroamérica que están cruzando la frontera suroeste, mientras, por otro lado, se documentó cómo empresas carcelarias lucran con la criminalización de la inmigración en los últimos años.
Una coalición de organizaciones de defensa de inmigrantes y derechos civiles, incluidos el Centro Nacional de Justicia del Inmigrante, la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), y Proyecto Esperanza, presentó una queja formal ante el Departamento de Seguridad Interna para denunciar que 116 menores de edad fueron sometidos a abuso sistemático y hostigamiento por agentes de la Patrulla Fronteriza. Sufrieron asalto sexual, golpizas, amenazas de muerte, insultos, encadenamiento, negación de atención médica, falta de comida y agua en instalaciones no sanitarias, sobrepobladas y con frío extremo.
Según la queja, los abusos sucedieron en Texas y Arizona con menores de entre 5 y 17 años, la mayoría procedentes de México y Centroamérica. La queja.
La denucia fue presentada mientras Estados Unidos enfrenta una ola de menores de edad que migran solos desde México, Guatemala, Honduras y El Salvador, cuyo total para el año fiscal en curso (1º de octubre de 2013 al 30 septiembre 2014) podría alcanzar 60 mil y hasta 90 mil, según proyecciones oficiales. En lo que va del año fiscal, los menores capturados por las autoridades fronterizas suman más de 47 mil, incremento del 92 por ciento sobre el total del año fiscal 2013.
El servicio de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos subrayó que no se tolera el maltrato y que ante el número abrumador de niños no acompañados que cruzan la frontera en el sur de Texas, agentes de la Patrulla Fronteriza han tomado medidas extraordinarias para los niños mientras están detenidos y mantener la seguridad en instalaciones sobrepobladas
, reportó la agencia Reuters.
Sin embargo, James Silkenat, el presidente de la principal asociación nacional de abogados de Estados Unidos, el American Bar Association, expresó hoy la preocupación de que los menores son detenidos en condiciones no sanitarias y apretadas
y que muchos reciben poca o nula representación legal
. Afirmó que es vital que estos niños sean protegidos
y que entiendan sus derechos lo más pronto posible.
Por otro lado, esta semana el ACLU emitió un informe con base en una amplia investigación de varios años en la cual concluyó que el gobierno federal somete a decenas de miles de inmigrantes no violentos a condiciones abusivas y maltrato, mientras enriquece a la industria carcelaria con fines de lucro a un costo tremendo para los contribuyentes
.
La amplia investigación de la ACLU en cinco prisiones de uso exclusivo para inmigrantes, conocidas como Criminal Alien Requirement
(CAR), en Texas, reveló cómo estas empresas privadas que administran las instalaciones bajo contrato de la Oficina de Prisiones del gobierno federal aumentan sus ganancias al sobrepoblarse, reducir costos al no ofrecer servicios básicos de atención médica, y mantener condiciones insalubres.
Las prisiones CAR ubicadas en Texas, y ocho más en otras partes del país, son operadas por tres empresas privadas (Corrections Corporation of America, GEO Group y Management and Traioning Corporation). Esas tres también administran otras prisiones privadas en el país, y tuvieron un ingreso combinado de 4 mil millones de dólares en 2012 por este negocio.
En las prisiones CAR que investigamos, los prisioneros viven día a día sin saber si sus necesidades humanas básicas serán atendidas, si recibirían atención médica si estuvieran heridos o enfermos. La Oficina de Prisiones crea incentivos perversos para que las empresas privadas de prisiones pongan en peligro la salud y la vida humana
, denunció Carl Takei, abogado del Proyecto Nacional de Prisiones del ACLU. No sólo eso, sino que el contrato entre la Oficina de Prisiones y estas empresas privadas no sólo requiere que se mantengan con una tasa de ocupación mínima de 90 por ciento, sino de hecho recompensa a las empresas si están sobrepobladas
, indicó Adriana Piñón, abogada del ACLU de Texas. El informe.
La creciente criminalización de la inmigración ha contribuido a la crisis de encarcelamiento masivo en este país, el cual tiene la población encarcelada más numerosa del mundo.
El Instituto de Política Migratoria reportó recientemente que la agencia de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos ahora es responsable de promover más casos penales a escala federal que la FBI, y que a nivel nacional más de la mitad de todos los procesos criminales federales iniciados en el año fiscal 2013 fueron por cruzar ilegalmente la frontera. Anteriormente eso se había tratado como una violación civil que resultaba en la deportación y no en un acto criminal que puede culminar en una condena de encarcelamiento en una prisión federal. Con ello, se está transformando la demografía de la población encarcelada aquí: a partir de 2009 por primera vez más gente ingresó a las prisiones federales por violaciones migratorias que por actos criminales de violencia, armas y daños a propiedad combinados.
Crisis moral
Mientras tanto, una carta firmada por más de mil líderes religiosos fue entregada hoy al secretario de Seguridad Interna, Jeh Johnson, en la que se hace un llamado a poner fin de inmediato a la separación de familias por las deportaciones y por la ampliación de la acción diferida
de deportación para inmigrantes indocumentados que podrían beneficiarse de cambios pendientes en las políticas de inmigración. Instaron al presidente Barack Obama a tomar acción lo más pronto posible para frenar lo que calificaron de crisis moral
por sus políticas de deportación y detención de inmigrantes.
Yo estoy aquí hoy porque soy una judía. Ser judía es asumir una tarea sagrada: recordar que en algún momento fuimos extranjeros en una tierra extranjera y tratar de manera igual a ciudadanos y extranjeros. Ser judío es recordar nuestro pasado migrante y mantenernos en solidaridad con los inmigrantes de hoy día
, afirmó la rabina Esther Lederman en una conferencia de prensa después de la entrega de la carta. El reverendo Earl Trent afirmó que “los afroestadunidenses no vinieron aquí, fuimos traídos aquí, por un sistema que deshumaniza y explota para lucrar. Hoy vemos a nuestros hermanos y hermanas –trabajadores indocumentados– mantenidos en las sombras y explotados por su mano de obra barata”, y llamó por el fin de políticas que permiten esto.