Los alienta que las Copas disputadas en América se quedan en casa
Martes 10 de junio de 2014, p. a14
Río de Janeiro, 9 junio.
El 68 por ciento de los brasileños confía en que su selección conquistará su codiciado hexacampeonato en el Mundial de 2014, según una encuesta del instituto Datafolha, vinculado al diario Folha de Sao Paulo, divulgada este domingo.
Alemania fue la segunda escuadra más citada en la encuesta, con 5 por ciento, seguida por Argentina y España, la actual campeona, con 3 por ciento cada una.
El sondeo reveló además que el mismo 68 por ciento de los que creen en la victoria brasileña evalúan el trabajo del seleccionador Luiz Felipe Scolari como óptimo o bueno
, lo que convierte al veterano estratega en el entrenador nacional más popular desde 2002, cuando el instituto empezó a medir la aprobación del director técnico.
Hasta ahora, el que tenía mayor aprobación era Carlos Alberto Parreira, actual coordinador técnico de la verdeamarela, que recibió 62 por ciento de respaldo cuando comandó a la selección en Alemania 2006, cuando Brasil , pese a contar con estrellas como Ronaldo, Ronaldinho Gaucho y Kaká, fue eliminado por Francia en cuartos de final.
El propio Scolari era el tercero de la lista, con 51 por ciento, en la encuesta realizada antes del Mundial de Corea/Japón 2002, en el que Brasil se alzó con su quinto título mundial.
Datafolha entrevistó entre el martes y el jueves pasados a 4 mil 337 brasileños mayores de 16 años, en 207 municipios de todo el país. Según el instituto, el margen de error de la encuesta es de dos puntos porcentuales.
El optimismo de los anfitriones puede descansar en la historia mundialista, de donde se desprende que las Copas que se disputan en América se quedan en casa. Un antecedente del que pueden sostenerse también selecciones como Argentina y Uruguay.
Para que continúe siendo así, los gigantes sudamericanos deberán superar a duros rivales como España, el actual campeón que busca un histórico póker de títulos, o la temible pero a la vez irregular Alemania.
España parece el mayor desafío, no sólo por su poderío, sino porque es la única selección europea que levantó el trofeo como visitante
en Sudáfrica 2010.
Alemania, semifinalista en los últimos dos mundiales, es un adversario de temer. Una generación de grandes jugadores está lista para dar el gran salto, aunque en los últimos meses sus actuaciones han dejado más dudas que certezas.
Holanda es otro contendiente de peso, como demostró con los buenos resultados en la fase final de preparación. Las variantes técnicas ensayadas por el entrador Louis Van Gaal no terminan sin embargo de convencer en la cancha.
Otras potencias como Italia y Francia buscarán repetir la gloria del pasado, mientras Costa de Marfil y Camerún intentan clasificar a semifinales por primera vez en su historia.