Lisboa, 24 de mayo.

Real Madrid se consagró como rey de Europa por décima vez en su historia tras vencer 4-1 al Atlético de Madrid en la prórroga de la final de la Liga de Campeones.

El equipo dirigido por el italiano Carlo Ancelotti recobró la vida en el tercer minuto de descuento del tiempo regular con gol agónico de Sergio Ramos, lo que le permitió disponer de media hora extra para revertir el resultado en el estadio Da Luz.

Así, el conjunto merengue se consolidó como el equipo más ganador del máximo torneo continental y puso fin a una sequía de 12 años sin el cetro europeo.

Gareth Bale confirmó la remontada al minuto 110 y Marcelo al 117 y Cristiano Ronaldo (119, de penal) sellaron el triunfo.

El cuadro colchonero, que hasta el minuto 93 era campeón con el gol del uruguayo Diego Godín al 36, volvió a quedarse en las puertas de la gloria continental y revivió los fantasmas de 1974, cuando perdió la final de la justa europea ante el Bayern Munich.

Hace 40 años el Atlético vio cómo se le escapó el título cuando en el último minuto de la prórroga el conjunto germano empató 1-1 y obligó a un duelo de desempate, en el que luego los bávaros ganarían 4-0.

El rojiblanco Diego Costa apareció en la oncena inicial, pero su falta de intensidad evidenció desde los primeros minutos sus problemas físicos y la aventura del delantero duró apenas ocho minutos.

No lo ayudó la placenta de yegua

El mejor atacante del Atlético no pudo contrarrestar su lesión ni con la ayuda de la placenta de una yegua –recetado por una médica serbia– y abandonó el partido.

Los dirigidos por Diego Simeone mostraron más actitud en el comienzo y expusieron mayor orden en el medio del campo, especialmente con el tridente formado por Gabi, Tiago y Raúl García.

En tanto, Real Madrid trataba de hacer pie con un mediocampo sin Xabi Alonso (suspendido) y con un Sami Khedira que había jugado menos de 90 minutos en los recientes cuatro meses.

El gol del Atlético se produjo por un error del rival. Juanfrán lanzó de cabeza el balón al corazón del área tras un despeje fallido de Raphael Varane y Godín – el mismo que dio el título de liga a su equipo en el Camp Nou– anotó de cabeza.

Gran parte de la responsabilidad de la anotación reposó en Iker Casillas, quien dudó a la hora de salir a cortar el pase de Juanfrán y quedó a mitad de camino a la hora de atajar la pelota.

Cristiano festejó el triunfo a su maneraFoto Ap

La final parecía rojiblanca hasta el minuto 93 –el silbante otorgó cinco minutos de compensación–, cuando Real Madrid logró el empate. Modric lanzó un tiro de esquina al corazón del área y Ramos se elevó para colocar la pelota de cabeza junto a un palo y hacer delirar a la mitad del estadio.

Con los dos equipos agotados, el partido se definió en los últimos 10 minutos de la prórroga. Di María provocó una atajada de Courtois, pero Bale se elevó en el área pequeña para capturar el rebote y anotar de cabeza el segundo tanto.

En los instantes finales el Atlético padeció los tantos de Marcelo y Cristiano Ronaldo, máximo goleador del torneo.

Momento trágico

Gabi Fernández, centrocampista del Atlético de Madrid, aseguró que el empate de Sergio Ramos en el último suspiro del partido fue un momento trágico.

El capitán rojiblanco felicitó al cuadro merengue y lamentó el momento en el que el merengue igualó el duelo: “Es futbol, tuvieron la oportunidad, la prórroga se nos hizo larga, fuimos dominados y ganaron. Competimos hasta el final, llevamos un año como animales y estoy orgulloso.

Simeone nos dijo antes de la prórroga que confiáramos en nosotros, que trabajáramos. No salían más fuerzas para más y enhorabuena al Madrid, agregó.

Ramos, a su vez, afirmó que el equipo hizo historia y que se merecían la décima después de tantos años. Destacó que el Atlético fue un grandísimo rival y un campeón de liga merecido.

El rojiblanco Juanfrán señaló: “El gol de Ramos nos hizo mucho daño en la prórroga y ya estábamos agotados. Igual sigo pensando que volveremos a jugar una final de Champions y estoy tranquilo”.

El Cholo Simeone fue recibido en la rueda de prensa con un aplauso. Aseguró que su equipo cayó “con la cabeza alta y que el partido no merece una lágrima. Ganar es lo más importante, pero también lo es el apoyo de la gente y estas cosas me hacen ver que no sólo existe la victoria.

Terminamos con amargura, pero no con tristeza porque lo dimos todo y cuando es así tienes que sentirte tranquilo.

De su lado, el entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti, visiblemente emocionado señaló: Ganamos la competencia más importante del mundo. Sólo puedo dar las gracias a estos jugadores por lo que han conseguido.