Con el temor de que en algunos estados, especialmente en Puebla, se registren prácticas de compra y coacción del voto que terminen por manchar la contienda interna, el PAN llega hoy a la elección de su dirigente nacional en medio de un duro enfrentamiento entre las corrientes y la posibilidad de que los resultados acaben por definirse en tribunales.

Los dos candidatos a la presidencia del blanquiazul, Ernesto Cordero y Gustavo Madero, aseguran que ganarán los comicios de este domingo, en los que podrán sufragar 217 mil 593 militantes. Esta es la primera ocasión en 75 años del instituto político que el jefe del panismo será electo por el voto directo de la membresía, como consecuencia de una reforma a los estatutos promovida por el senador Javier Corral y que retiró esta facultad al Consejo Nacional, integrado por 300 notables.

El equipo de campaña de Madero estima que alcanzará la victoria con 60 por ciento de los sufragios y una diferencia de más de 10 puntos, mientras que los colaboradores de Cordero destacan su ascenso en la intención de voto durante los pasados dos meses, de manera que calculan triunfar con un margen de ocho puntos.

Sin embargo, en el Comité Ejecutivo Nacional se evalúa que Madero podría ganar con una distancia de alrededor de cinco puntos, aunque no se descartan sorpresas, dado el crecimiento que tuvo la candidatura de su contendiente.

Actuario por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), Ernesto Cordero Arroyo (46 años) busca por primera vez la dirigencia del PAN. Oriundo de la ciudad de México, ha hecho su carrera política de la mano del ex presidente Felipe Calderón, en cuyo gobierno fue secretario de Desarrollo Social y de Hacienda. En 2012 perdió la postulación del blanquiazul a Los Pinos, frente a Josefina Vázquez Mota, y meses después se convirtió en el coordinador de los senadores, cargo del que fue removido por su actual adversario en un episodio más de la lucha que han protagonizado maderistas y corderistas por el control del partido.

Gustavo Madero (59 años) contiende por la relección en la jefatura partidista, cargo que ganó en 2010 luego de solicitar licencia como senador. Originario de Chihuahua, es licenciado en comunicaciones por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO). Trabajó en el gobierno de Francisco Barrios y también ha sido diputado federal. En su administración, Acción Nacional perdió la presidencia de la República.

Los candidatos llegan a la elección tras 60 días de proselitismo en el que hubo acusaciones de corrupción y sometimiento al PRI y al gobierno de Enrique Peña Nieto, guerra de encuestas, descalificaciones y tintes de campaña negra.

Durante esos dos meses, el chihuahuense consolidó una estructura electoral construida en tres años de gestión, a partir de alianzas con gobernadores y liderazgos nacionales y locales, mientras que el ex secretario de Hacienda pudo crear una amplia red de apoyo, de manera tal que la mayoría de los estados donde se concentra el padrón de militantes, están divididos, es decir, los dos aspirantes cuentan con grupos estatales que respaldan sus pretensiones.

A manera de ejemplo se puede citar el caso de Veracruz, donde Miguel Ángel Yunes, ex director del Issste, apoya al interesado en la relección, en tanto Julen Rementería, ex presidente municipal del puerto de Veracruz, y Enrique Cambranis, ex dirigente del partido en esa entidad, se encuentran con el antiguo responsable de las finanzas del país. En condiciones similares está Nuevo León, Jalisco y estado de México, entre otros.

La comisión organizadora del proceso electoral, presidida por Francisco Gárate, informó que 217 mil 593 militantes tendrán derecho a sufregar al tener al menos un año de afiliación, se abrirán mil 258 centros de votación en plazas públicas y en los comités directivos estatales y municipales del PAN.

Las casillas funcionarán de 10 a 17 horas en el huso horario del centro del país, mientras que en el del pacífico abrirán y cerrarán una hora antes, y dos horas previas en el del noroeste, donde están incluidos Baja California y Sonora. La instancia electoral calculó que habrá una participación de 75 por ciento de los empadronados.

Gárate se declaró el viernes preparado para la jornada de hoy, pero en el equipo de campaña de Cordero existen dudas de si funcionará el programa de resultados preliminares, pues los simulacros previstos no se pudieron realizar debido a problemas detectados en la transmisión de datos. A ello se suman las dificultades para la buena difusión del pasado debate entre los abanderados.

Las corrientes en competencia acreditaron representantes en las casillas y han establecido operativos para vigilar el desarrollo de la jornada comicial. Para los corderistas son motivo de preocupación los estados de Puebla y Oaxaca, debido, por ejemplo, a la grosera intromisión del gobernador poblano Rafael Moreno Valle, denunciaron.