Sebastopol, 9 de mayo.

El presidente ruso, Vladimir Putin, aseguró hoy que el retorno de la península de Crimea a Rusia restaura la verdad histórica, al pronunciar un discurso ante miles de habitantes de esta ciudad, donde conmemoró la victoria sobre las tropas alemanas en 1945. Mientras, al menos 20 separatistas pro rusos y un policía ucranio murieron en enfrentamientos en la ciudad portuaria de Mariupol, sudeste de Ucrania.

A pocos días de un referendo organizado por los separatistas en el este de Ucrania, Putin desafió a Kiev y a Occidente con un acto cargado de nacionalismo en el puerto crimeo de Sebastopol.

El líder ruso pasó revista a la flota rusa a bordo de un buque, entre gritos de ¡hurra! de marinos y miles de espectadores.

La anexión de Crimea fue una verdad histórica, declaró Putin ante una multitud entusiasta, la cual copaba los muelles del enorme puerto.

El 2014 permanecerá en los anales como el año que vio cómo los pueblos que viven aquí decidieron firmemente seguir con Rusia, subrayó.

La península fue entregada a Ucrania en 1954 –durante el periodo soviético– y permaneció bajo soberanía de ese país hasta su anexión, en marzo pasado, mediante un referendo, que ni Kiev ni las potencias occidentales han reconocido.

Horas antes, en Moscú, Putin elogió la fuerza triunfal del patriotismo ruso, durante el tradicional desfile militar para conmemorar la victoria soviética en 1945 contra la Alemania nazi en la Plaza Roja.

La fuerza triunfal del patriotismo ruso sale victoriosa en esta celebración, en la que todos sentimos de manera especial lo que significa ser fiel a la patria y lo importante que es defender sus intereses, declaró Putin ante las tropas y los veteranos de la Segunda Guerra Mundial.

El tradicional desfile fue planteado este año como demostración de fuerza militar con la participación de 11 mil soldados, en el contexto de la crisis con Ucrania.

El Día de la Victoria es el festejo laico más importante de Rusia y elemento crucial de su identidad nacional.

En Ucrania, las autoridades interinas de Kiev realizaron una ceremonia discreta en un parque, en presencia del primer ministro Arseni Yatsenuk.

El gobierno interino de la república ex soviética calificó la visita de Putin a Crimea de abierta falta de respeto, según una declaración del Ministerio del Exterior en Kiev.

La dependencia dijo que Rusia viola las leyes ucranias, los acuerdos fronterizos bilaterales y la Carta de Naciones Unidas.

Esta provocación es otra prueba clara de que Rusia permite la escalada de las tensiones en la relación ruso-ucrania y no tiene voluntad para poner fin diplomáticamente a esta disputa bilateral, señaló un comunicado.

En el terreno, 20 separatistas pro rusos y un policía fallecieron en enfrentamientos este viernes en la sureña ciudad portuaria de Mariupol, informó el ministro ucranio del Interior, Arsen Avakov.

Cinco policías resultaron heridos y cuatro insurgentes fueron capturados, señaló Avakov en Facebook. Gran parte de los asaltantes desaparecieron de la ciudad y abandonaron las armas, apuntó.

El funcionario comentó que el gobierno está abierto a negociar con quienes estén dispuestos a sentarse a la mesa, pero juró destruir a quienes tomen las armas. Prometió no permitir que Ucrania se convierta en una zona en llamas, donde la muerte sea la norma.

Los separatistas ocuparon el edificio de las fuerzas de seguridad en esa ciudad en días pasados. Los tanques (ucranios) llegaron y dispararon contra el edificio, aseguró un testigo. Hubo muchísimos disparos, añadió. El edificio acabó incendiado y en ruinas.

En Slaviansk, bastión pro ruso, se reportaron disparos y detonaciones durante la madrugada del viernes. Según la agencia Interfax, unos 40 hombres armados intentaron tomar el jueves por la noche, sin éxito, un puesto fronterizo en la región de Lugansk.

A su vez, los separatistas pro rusos propusieron como líder de la insurreción armada a un hombre llamado Igor Strelkov, quien fue presentado en la ciudad de Slaviansk. Según los servicios de seguridad de Ucrania, es un coronel de los servicios secretos rusos.

En Donetsk y Lugansk los separatistas afinan los preparativos del referendo que llevarán a cabo el domingo sobre la declaración de independencia para oficializar su separación de Ucrania y una eventual adhesión a Rusia.