Miércoles 7 de mayo de 2014, p. 25
La Paz. Los militares de bajo rango que mantuvieron una huelga durante más de dos semanas en Bolivia para exigir reformas y el cese de la discriminación racial, retornaron ayer a los cuarteles mientras se tramitan sus peticiones. La cúpula castrense ordenó la semana pasada la reincoporación de 430 de los 715 dados de baja durante el conflicto. El resto será readmitido en las fuerzas armadas paulatinamente. El conflicto estalló en abril, con la publicación de un anteproyecto de ley orgánica de las fuerzas armadas que planteaba la descolonización, y el rechazo a la discriminación racial vigente en los cuarteles, donde la mayoría de los subalternos provienen de los pueblos aymaras o quechuas.