La migración de mexicanos en busca de empleo a Estados Unidos, que cayó prácticamente a cero después de la crisis que estalló en aquel país en el otoño de 2008, comenzó a repuntar en los últimos meses, aseguró BBVA Bancomer, principal grupo financiero en México.

Vemos señales de que el flujo neto de migrantes, que llegó a estar en cero después de la crisis se está revirtiendo, expuso hoy Carlos Serrano, director de estudios económicos de BBVA Bancomer, en la presentación del Anuario de migración y remesas México 2014, publicado por ese grupo financiero.

El flujo neto de migrantes es la diferencia entre el número de mexicanos que sale del país y el que regresa después de haber pasado un tiempo en otra nación; sin considerar el movimiento de turistas.

Entre 2000 y 2008, explicó Carlos Serrano, se dio la mayor ola de migración de mexicanos a Estados Unidos, superior a las registradas en los años 20 y a mediados del siglo pasado. Según datos oficiales, que no formaron parte de la presentación del especialista de BBVA Bancomer, antes del inicio de la crisis de 2008-2009, al menos medio millón de mexicanos emigraba cada año.

La crisis económica, que afectó inicialmente al sector inmobiliario, se trasladó después a la construcción y al resto de la economía estadunidense y mundial.

La industria de la construcción emplea a 17 de cada 100 mexicanos que labora en Estados Unidos, explicó Serrano.

Todavía no estamos en los niveles de emigración registrados antes de la crisis, pero ya hay señales muy claras de que está volviendo a darse la emigración de mexicanos que buscan un empleo en Estados Unidos, dijo. El flujo neto de migrantes, que estaba en cero, ya se está revirtiendo, lo que implica que emigran más de los que regresan, añadió.

En el reinicio del flujo de migrantes mexicanos a Estados Unidos influye el incremento en las oportunidades de empleo en sectores que más los emplean, sobre todo en algunas partes de Texas, uno de los cuatro estados (junto con California, Arizona e Illinois) donde existe mayor concentración de comunidades de mexicanos.

Está aumentando el empleo en sectores que más emplean mexicanos, sobre todo de algunas partes, como Texas, en construcción y esto está haciendo que se estén reactivando los flujos de migración nuevamentea Estados Unidos, añadió. Se ha hablado mucho de los distintos factores que pueden influir en la migración a Estados Unidos. Se dice de la seguridad en la frontera o las condiciones económicas en México. Lo que encontramos es que el factor que explica la migración son las oportunidades de empleo que existen en Estados Unidos y los diferenciales salariales, comentó.

El Anuario de migración y remesas México 2014 destaca que dos de cada tres migrantes mexicanos en Estados Unidos (64.6 por ciento del total) se ocupa en el sector de los servicios, un dato que, a juicio de Serrano, viene a desmitificar la afirmación de que los mexicanos que laboran en Estados Unidos lo hacen sobre todo en el campo.

En el periodo de 2000 a 2013, el porcentaje de mexicanos empleados en el sector terciario; es decir, en los servicios, se incrementó de 51.2 a 64.6 por ciento; mientras, su participación en sectores secundario (industria) y primario (actividades agropecuarias) disminuyó, al pasar de 36.6 a 30.6 por ciento y de 12.1 a 4.8 por ciento, respectivamente.

La actividad económica en la que más migrantes mexicanos se encontraban ocupados en 2013 fue el alojamiento y el esparcimiento (17.6 por ciento), seguida por la construcción (17 por ciento), los servicios profesionales y administrativos (13.4 por ciento) y manufacturas (12.9 por ciento).