lgunos de ellos son mis amigos, se lamentó Luis Armando Reynoso Femat en el Centro de Readaptación Social (Cereso) durante su declaración preparatoria, cuando la secretaria hizo referencia a los medios de comunicación que atestiguaban la inusual presencia de un ex gobernador detrás de la rejilla de prácticas.

Aprehendido el viernes, acusado de peculado en agravio de la administración pública estatal por un monto de 26 millones de pesos (causa penal 116/2014), Reynoso Femat busca un gesto de solidaridad, pero sus amigos y empleados están prófugos o escondidos; nadie hace eco de su lamento. Desesperado, califica su detención de revancha política y pide a sus abogados que tramiten ante un juzgado federal un amparo porque desconfía de la autoridad local.

Triste espectáculo el de Reynoso Femat intentando desviar la atención para que a la acusación de peculado no se sumen otras averiguaciones. No quiere que nadie recuerde el gasto en terrenos inútiles por más de mil 500 millones de pesos, o el préstamo de 98 millones que se concedió por conducto de terceros para cumplir el capricho de traer el Necaxa a Aguascalientes, o la compra fingida de un tomógrafo para embolsarse los recursos. Tampoco desea se integre la investigación por lavado de dinero, ni el regalo de concesiones de taxis a sus cómplices… Apela a que nadie se acuerde de los excesos durante su administración. Hoy llama amigos a quienes intentó callar censurándolos.

Si bien Reynoso Femat está en el Cereso, no ha pisado una celda. Al igual que Elba Esther Gordillo, se encuentra recluido en el área de clínica; se le da trato de huésped distinguido, en espera de que se resuelva esta misma semana su detención.

Abandonado, abatido, rechazado, sólo le queda apelar a la amistad que hoy nadie le brinda; espera que nadie recuerde la corrupción de la que obras inacabadas como el nuevo hospital Hidalgo o el Centro de Convenciones dan cuenta. Es posible que, a pesar de las evidencias, a Luis Armando Reynoso Femat le alcance para salir libre bajo fianza, pero su ficha signalética ahí quedará; no se llama revancha: se le conoce como justicia.

www.lja.mx

Twitter: @jornadags