Con el compromiso de las delegaciones de más de 136 de combatir la corrupción, el lavado de dinero y el flujo ilícito de recursos, fomentar a transparencia y rendición de cuentas como medio para incrementar la cooperación para el desarrollo, concluyeron los trabajos de la primera reunión de alto nivel de la Alianza Global para la Cooperación Eficaz al Desarrollo, que tuvo lugar en México.

Particular interés despertó la cooperación sur-sur, que, desde la perspectiva de México planteada ante el pleno por el canciller José Antonio Meade, debe entenderse como un complemento de la cooperación tradicional y no como sustituto de ella.

El hecho de que el sur estimule sus esfuerzos de cooperación no debe provocar que los donantes tradicionales disminuyan la cooperación norte-sur, dijo ante los delegados congregados en el Distrito Federal.

A su vez, la ministra de Finanzas de Nigeria, Ngozi Okonjo-Iweala, destacó que la única forma de evitar que las empresas rebasen a los gobiernos y se constituyan en un Estado dentro del Estado es con leyes antimonopolio fuertes, que no sólo propicien la competencia, sino que obliguen al sector privado a pagar impuestos justos y a generar empleo digno, tras reconocer que este es uno de los problemas más graves que enfrentan naciones de renta media, como su país y México.

En la ceremonia de clausura, que encabezaron el canciller Meade; Armida Alisjahbana, ministra para la Planeación al Desarrollo de Indonesia, y Justine Greening, Ngozi Okonjo-Iweala enfatizó que en materia de recaudación de impuestos, que caracteriza a muchas naciones de renta media, debe incorporarse a quienes viven en la economía informal, ofreciéndoles a cambio mejores servicios. Cobrar impuestos sin ofrecer nada a cambio simplemente no funciona.

Los asistentes a la reunión convinieron 29 acuerdos para promover el desarrollo y erradicar la pobreza, como mejorar la integración de actores no gubernamentales al compromiso colectivo de la promoción del desarrollo y reconocer la relevancia creciente de la iniciativa privada en este proceso, bajo la perspectiva de que el lento e inequitativo crecimiento económico, la inseguridad en la proveeduría de alimentos, agua y energía, además de las dificultades para el acceso equitativo a la educación y al empleo, son temas cotidianos que es preciso resolver.

Justine Greening expuso que el tema de la transparencia del sector privado es una de las áreas en la que esta comunidad se está enfocando particularmente.

En lo que respecta a la movilización de recursos a escala país, dijo Armida Alisjahbana, los compromisos se centran en cómo reforzar los ingresos y las bases fiscales nacionales, además de promover que los donantes dupliquen el porcentaje que destinan al desarrollo, que en la actualidad es de uno por ciento.

Los países de renta media, como México, subrayaron la creciente actividad en el intercambio de experiencias para el desarrollo y en la cooperación con naciones en desarrollo mediante la infraestructura, servicios públicos y protección social.

De igual manera, destacaron la relevancia de la cooperación triangular que traslada a los países receptores de ayuda el aprendizaje que previamente se produjo en la cooperación tradicional, es decir norte-sur.

Asimismo, marcaron la relevancia de la creación y protección de medianas y pequeñas empresas para la generación de empleos, y reclamaron el acceso a créditos suficientes y en mejores condiciones para su desarrollo.