Valencia, 16 de abril.

Real Madrid conquistó la Copa del Rey al ganar 2-1 al Barcelona, en final apasionante que se resolvió con una genialidad del galés Gareth Bale en los últimos instantes.

El delantero apareció con uno de los goles de la temporada, que además vale un campeonato, el primero de Carlo Ancelotti como entrenador de los merengues.

En cambio los azulgranas siguen entregando títulos. Primero se despidieron de la Liga de Campeones, luego quedaron relegados en la liga española y ahora cayeron ante su archirrival.

Con Cristiano Ronaldo fuera, Ángel Di María ocupó su puesto, pero no lo hizo como atacante, sino que se incorporó a la medular. El equipo blanco jugó con 4-4-2, lo que favoreció las coberturas defensivas, al tiempo que cuidó el balón.

El Barça también se plantó con un 4-4-2, dejando a Alexis Sánchez en el banco para alinear a Cesc Fábregas, pero, a diferencia de los blancos, su juego fue muy previsible. En esto contribuyó Lionel Messi, tan ausente como en las recientes semanas.

Entre los defectos visibles del actual Barcelona, en el primer gol merengue aparecieron dos de los llamados sospechosos habituales: Dani Alves y José Pinto. El brasileño perdió el balón, Isco lo recuperó y cedió a Benzema, para que el francés tocara a Di María.

El argentino tiró cruzado y Pinto puso una mano muy blanda. Lo siguiente que hizo el arquero fue sacar el balón de las redes.

El tanto afianzó la propuesta del Real Madrid, que encontró dos actores principales en las figuras de Isco y Benzema. Mientras el volante ofreció una nítida salida del balón, el segundo supo descargar y asistir. Si el cuadro blanco no aumentó la cuenta fue por falta de puntería... o por la ausencia de Ronaldo.

El conjunto culé tardó 22 minutos en probar a Iker Casillas, quien atajó sin problemas un débil remate de Jordi Alba. No hubo más noticias de los azulgranas en el ataque durante la primera parte, cuyos centros desde las bandas fueron regalos para la defensa.

La segunda mitad comenzó con la salida de Alba por lesión y la entrada de Adriano. Y por esa banda izquierda llegó una galopada de Bale que finalizó con un disparo fuera. El galés repitió poco después con un disparo que se fue alto.

Sin embargo, en este tipo de partidos suele aparecer un actor inesperado y esta vez fue Bartra. En un saque de esquina, Pepe le dio más distancia de lo aconsejable y el joven central conectó un espectacular cabezazo para cortar la racha sin precedentes de Casillas, quien no había aceptado un solo gol en el torneo.

Entonces el título iba a depender de cualquier detalle, error o una genialidad. Ocurrió esto último con la firma de Bale.

Al minuto 85 Coentrao envió un balón larguísimo al centro del campo; Bartra intentó sacar al galés pero éste enseñó su perfil de velocista. Fue un rayo ante una lentitud desesperante y marcó ante la tímida salida de Pinto.

La otra cara de la moneda la tuvo Neymar, el otro fichaje multimillonario de la temporada, quien en el último minuto, de frente y sin marca, estrelló el balón en el palo, que después Casillas tocó para agradecer la suerte.

Real Madrid pagó más de 90 millones de euros por Bale, quien esta noche comenzó a rentabilizar. Fue un gol que dio a los merengues su decimonovena Copa del Rey, y de paso mantiene al Barcelona entre dudas y a Martino con un pie fuera, pero el argentino se defendió: “Mi futuro no depende de este resultado.

Siento un profundo dolor por la derrota y por la gente que nos apoya. Este equipo tiene mucho camino por recorrer y cosas positivas por hacer, agregó, mientras Xavi Hernández comentó: El resultado es un poco impostor. Llevamos el peso del partido.

Por su parte, Ancelotti señaló: Jugamos al máximo como necesitaba el partido. Barcelona intentó entrar, pero supimos jugar. Tomaremos fuerza de este título para afrontar las otras dos competencias... El ciclo del Barça no ha terminado.