La Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso) del Gobierno del Distrito Federal trabaja con una organización civil en un programa de atención a las cerca de 5 mil personas en situación de calle –de las cuales seis de cada 10 no son del Distrito Federal–, para dotarlas de herramientas laborales, educativas y de salud, con la finalidad de reinsertarlas en la sociedad, dio a conocer Rosa Icela Rodríguez.

Al término de la firma de un convenio con la empresa privada Kidzania, para que 9 mil niños inscritos en el programa Educación Garantizada ingresen de manera gratuita en sus centros de educación y entretenimiento, la funcionaria señaló la necesidad de trabajar en una ley dirigida a este sector.

Hoy, explicó, no estamos autorizados para llevarnos de manera forzada a una persona con problemas siquiátricos, como tampoco separar a los niños de sus padres cuando éstos se estén drogando o haciéndolos adictos, porque incurriríamos en un delito.

Diariamente nos enfrentamos a esa disyuntiva, pero la ambigüedad de la legislación impide actuar y definir la responsabilidad de la autoridad, haciéndonos omisos, pues, de intervenir y separar a un niño de su madre, corremos el riesgo de ser acusados de desaparición forzada, por ejemplo, afirmó.

Por eso se trabaja de la mano con una organización civil (de la cual no quiso revelar su nombre) para atender a poblaciones como las de Tasqueña y Ar-tículo 123, que son algunos de los 176 puntos de reunión de población callejera identificados, sin violentar sus derechos, pero escuchando también la opinión de los vecinos.

La dependencia, precisó, no cuenta con un censo, sino con un conteo, donde se tienen 3 mil, 4 mil o 5 mil, dependiendo de las fechas, pero los 2 millones de pesos recibidos para el Programa de Atención Social Emergente y los 10 millones para albergues, donde diariamente se atiende a 3 mil personas, son insuficientes.

Por ello se firmó un convenio con una organización civil para trabajar en un programa de atención de este sector, con recursos públicos y privados, y evitar que sus puntos de reunión sean permanentes y cuenten con herramientas para salir adelante, indicó.