Villahermosa, Tab., 8 de abril.

Por octavo día consecutivo, pobladores de 75 comunidades de los municipios de Nacajuca y Jalpa de Méndez bloquean caminos que conducen a instalaciones petroleras de esa región de la Chontalpa chica para pedir que se reanude el diálogo con representantes de Petróleos Mexicanos (Pemex) y del gobierno del estado.

Los inconformes reclaman indemnización por los estragos que causó la fuga de gas del pozo Terra 123, ocurrida el 19 de octubre y controlada en diciembre pasado; sin embargo, otros demandan la salida de Pemex de sus tierras.

La diputada perredista Verónica Pérez Rojas, quien encabeza a los demandantes, ha dicho que hay aproximadamente 50 mil familias afectadas por la contaminación.

Las pláticas se rompieron el 25 de marzo porque Pemex se negó a pagar los daños y los demandantes aseguraron que la Secretaría de Recursos Naturales y Protección al Medio Ambiente, parte mediadora del gobierno del estado, apoyó a la empresa.

Ahora los afectados exigen que se reanuden las pláticas.

Según Pérez Rojas, en la zona hay 126 pozos petroleros que operan con normalidad, entre ellos el Terra 123, cuya fuga de gas contaminó sembradíos, cuerpos de agua y provocó la muerte de animales de corral. Los lugareños demandan además obras, viviendas y servicios de salud.

Los bloqueos se llevan a cabo en distintos puntos, pero la mayor concentración se encuentra en las rancherías Arroyo-Oxiacaque, en el camino donde se localiza el campo Sen, el más importante de la región. Otro está en la comunidad Amatitán, municipio de Jalpa de Méndez.

Candelario Pérez Alvarado, dirigente estatal del Partido de la Revolución Democrática, dijo que es importante retomar el diálogo con la paraestatal para lograr acuerdos que beneficien a las comunidades.

Los lugareños llevan cuatro meses en demanda de la reparación de los daños y han realizado un par de marchas masivas en la capital tabasqueña.