Gradual, el restablecimiento de servicios; en Arica 90% de los habitantes ya tienen luz
La pérdida de viviendas es uno de los problemas más graves, revela diagnóstico de ministros
Nuevo temblor sacude tres zonas del centro del país; no es réplica, afirman sismólogos
Sábado 5 de abril de 2014, p. 21
Santiago, 4 de abril.
Chile restablece gradualmente la electricidad, el agua, los combustibles y otros servicios esenciales tres días después del terremoto de 8.2 grados Richter y sus cientos de réplicas que sacudieron el norte del país, donde se mantendrá el estado de catástrofe, el cual permite disponer de fondos extraordinarios mientras se normaliza la situación en la región.
Por la noche, un fuerte sismo sacudió tres regiones de la zona central del país y levemente otras zonas. El temblor duró cerca de dos minutos.
Según sismólogos, este movimiento telúrico no tiene relación con los dos terremotos del norte del país, a unos mil 800 kilómetros de distancia, pero por una desafortunada coincidencia
fue antecedido por una réplica en dicha región.
La presidenta Michelle Bachelet, quien regresó anoche a Santiago tras visitar dos días las zonas afectadas, manifestó hoy, durante un consejo de ministros, que el estado de catástrofe se prolongará el tiempo que sea necesario
, es decir, hasta que estén restablecidos todos los servicios, la gente tenga techo y las carreteras estén operando.
En Arica, más de 90 por ciento del suministro eléctrico está repuesto, mientras en la región de Tarapacá, especialmente en el pueblo de Alto Hospicio, el servicio de luz se reanudó a menos de la mitad de las casas, explicó el ministro de Energía, Máximo Pacheco. El agua, en tanto, está disponible en más de 80 por ciento de la ciudad de Iquique y Alto Hospicio.
En la reunión en La Moneda se hizo una evaluación de las tareas que están realizando los diferentes ministerios para normalizar la vida en el norte del país y coordinar las acciones que se desarrollarán.
El portavoz del gobierno, Álvaro Elizalde, dijo que “la presidenta solicitó un diagnóstico de los daños permanentes para poder adoptar acciones e iniciar la reconstrucción. Entre los problemas más graves está la pérdida de viviendas y la situación de pescadores y agricultores.
A las seis víctimas mortales que dejó el sismo el martes pasado se sumó hoy otra. Se trata de una bebé de seis días de una familia damnificada que pasó los últimos días evacuada. El neonato falleció de hipotermia. También se decretó la alerta sanitaria, lo que permitirá, según la ministra de Salud, Helia Molina, facilidades en términos de recursos y la compra de insumos.
Ante el temor y la incertidumbre, la población ha hecho compras de pánico de artículos básicos, provocando un alza de los precios. Ante ello, la policía realizó las primeras detenciones de especuladores.