Todo está detrás del Plan de la Patria, concebido por Chávez, dice
Jueves 3 de abril de 2014, p. 25
Caracas, 2 de abril.
Las protestas en Venezuela tienen su origen en la pretensión del partido oficial y autoridades de la república de implantar el Plan de la Patria, detrás del cual se esconde la imposición de un gobierno totalitario
, aseguró hoy la Iglesia católica, horas después de que el gobierno del presidente Nicolás Maduro manifestó su disposición a una mediación del Vaticano para poner fin a las movilizaciones que han dejado 39 muertos.
Diego Padrón, presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, expresó en rueda de prensa su preocupación por la polarización política que vive el país, con protestas opositoras que desde febrero se han vuelto cotidianas, acompañadas por hechos de violencia que han dejado unos 550 heridos y más de un centenar de detenidos.
El Plan de la Patria es un programa de gobierno concebido por el fallecido presidente Hugo Chávez (1999-2013) para consolidar el socialismo del siglo XXI
. En 2013 el plan fue elevado a rango constitucional por el oficialismo en la Asamblea Nacional en medio de duras críticas de la oposición.
Lo que ocurre en Venezuela es sumamente grave tanto por su magnitud (...) como por su duración, violencia y nefastas consecuencias para nuestro presente y futuro
, añadió Padrón, quien rechazó la criminalización de la protesta ciudadana
.
El detonante de las protestas iniciadas por estudiantes en San Cristóbal fue la inseguridad y luego las marchas se extendieron en el país con la activa participación de partidos opositores, sumado reclamos contra la inflación de 57 por ciento, la escasez de alimentos, la represión policial y la detención de opositores.
Entre los opositores detenidos figuran el líder del partido Voluntad Popular, Leopoldo López, y dos alcaldes que fueron destituidos de su cargo. Además, las protestas han provocado decenas de denuncias de maltrato y tortura policial.
Denunciamos la abusiva y desmedida represión contra ellos (los manifestantes), las torturas de que han sido objeto muchos de los detenidos y la persecución judicial a alcaldes y diputados contrarios al oficialismo
, señaló Padrón.
El gobierno se equivoca al querer resolver la crisis por la fuerza, la represión no es el camino
, añadió.
Las protestas han bajado en intensidad, y número, pero se mantienen algunos focos de violencia, sobre todo en el municipio caraqueño de Chacao (este, opositor), donde este miércoles un grupo de radicales volvió a enfrentarse con bombas molotov y piedras a la policía y a la Guardia Nacional, que los dispersaron con gas lacrimógeno, perdigones y chorros de agua.
La crítica de la Iglesia católica, que ha sostenido una tensa relación con el chavismo, ocurre luego de que el gobierno y la oposición aceptaron un testigo
del Vaticano durante un eventual diálogo.
A su vez, el presidente Maduro declaró: la oposición ha dicho que quiere que venga también Pietro Parolin. Yo les dije que si quieren traigan al Papa. Ahora, que no le vayan a hacer perder el tiempo
, e instó a los opositores a cesar las manifestaciones violentas.
Un vocero del papa Francisco aseguró también el martes que el Vaticano y el cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin, que conoce bien y ama Venezuela por haber sido nuncio en ese país, están dispuestos y deseosos de hacer lo posible para el bien y la serenidad
de los venezolanos.
Padrón respaldó la mediación del Vaticano para entablar un diálogo sincero
con todos los sectores, aunque el arzobispo de Caracas, Jorge Urosa, explicó que no se ha recibido una notificación del gobierno.
El 26 de febrero Maduro lanzó un diálogo nacional de paz con distintos sectores en el que participaron jerarcas de distintos cultos religiosos y empresarios, pero al que rechaza asistir la Mesa de Unidad Democrática (MUD), que congrega a partidos opositores de distintas tendencias.
Para dialogar, la MUD ha puesto cinco condiciones, todas rechazadas por Maduro, entre ellas la liberación de los detenidos en las protestas.
La ex diputada opositora venezolana María Corina Machado acusó a los países latinoamericanos de dar la espalda
a Venezuela, al hablar en Brasilia ante los integrantes de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado. Comparó al gobierno de Maduro con la dictadura militar que gobernó Brasil entre 1964 y 1985.
A su vez, la cancillería venezolana rechazó declaraciones de Maja Kocijanic, vocera de la alta representante de la Unión Europea, Catherine Ashton, por considerarlas injerencistas, injustificadas y sin fundamento
.