El Movimiento Regeneración Nacional (Morena) aseguró ayer que la conmemoración de la expropiación petrolera la realizó en resistencia contra el gobierno federal y su reforma energética, que permite la privatización del crudo.

En el monumento a Lázaro Cárdenas, en la ciudad de México, Javier Jiménez Espriú, en nombre del grupo Ingenieros Petroleros Constitución de 1917, indicó que esa fecha es el punto de partida para una nueva gesta nacionalista que rescate la expropiación, la fortalezca e impida la consumación de la traición.

Ante cientos de integrantes de Morena, denunció que ya están organizados “los nuevos cárteles del tráfico del petróleo, los cuales harán su agosto si el gobierno se sale con la suya. Los nuevos capos de esos cárteles, cuyos nombres aparecen en las columnas políticas y económicas de los periódicos, son funcionarios públicos y familiares y amigos de políticos que aspiran a figurar pronto en las listas de millonarios de la revista Forbes”, destacó.

“Ya empezó la guerra entre cárteles. La acusación de Oceanografía y el chantaje del PAN al PRI para estorbar la aprobación de leyes secundarias, para que no se afecte a sus miembros involucrados en los fraudes, no son sino luchas intestinas del PRIAN para definir sus territorios para el enorme negocio que se avecina.”

Por su parte, el presidente nacional de Morena, Martí Batres, resaltó que la conmemoración de ayer fue un acto contra la reforma energética, pero también es una jornada de lucha contra las llamadas reformas estructurales. Pocas veces el pueblo de México ha sido sometido a tantas agresiones en tan poco tiempo como ahora.

Resaltó que en sólo un año, el gobierno federal hizo aprobar en el Congreso todas las modificaciones que quiso para desaparecer derechos, desnacionalizar y privatizar. Trató a los legisladores como sus sirvientes.